"Ocultar los secretos poco edificantes es un pilar de lo que llamamos convivencia"

Juan Miguel Alonso Vega es el autor de 'El secreto de Lettsworth'

David Rubio
07/12/2022
 Actualizado a 07/12/2022
Juan Miguel Alonso Vega. | J.R. VEGA
Juan Miguel Alonso Vega. | J.R. VEGA
Juan Miguel Alonso Vega (Juanmi) es un clásico de la defensa de la enseñanza pública, primero como sindicalista, siempre como profesor o antes como alumno. Y gran lector y, tal vez por ello, escritor. De suetapa universitaria quedó la pasión por la literatura y una novela que cuenta en clave de humor y trama 'negra' su visión de aquella apasionante etapa en la universidad y la sociedad. Ahora se va con la trama de su novela a hasta Nueva Orleans pero, avisa, bien podría ser Toldanos.

– ¿Cuándo empezó a escribir?
– En laépoca delinstituto. Tuve la suerte de tener estupendos profesores de Lengua y Literatura en el Padre Isla, entreellos unfenómeno queresponde al nombre de Bernardino González, , yallí hicemis primeras letras. Naturalmente, iban siempre ligadas a mi bautismocomo lector. No hayescritura sinlectura, sondos carasde la misma moneda.

– ¿Por qué?
–En aquelmomento, niidea. Supongo que por undeslumbramiento inicial ante la literatura y por la osadía de jugar a ser escritorcuandoaún no sabes niquiéneres. Pocodespués, mis padres me compraron una máquina deescribir, una Olivettinaranja, que me convertía ya en unescribano conherramienta. Luego ya supeque escribimos para explicar elmundoy paraexplicarnos a nosotros mismos, y,sobre todo,comodiceMárquez , para quenosquieran..

– ¿Quiénes fueron sus primeros referentes?
– En aquellos primeros años, Delibes, Valle-Inclán, Cortázar, Marsé,Mendoza, Vázquez Montalbán, Julio Llamazares, y , sobre todo,García Márquez. Cien años de soledad supuso encontrarme con que Dios era un colombiano pequeñito y conbigote, una revelación . También muy pronto me engancharonlosclásicos de la novelanegra:Hammett, Highsmith, Chandler o Ellroy.

– ¿Y sus referentes actuales?
–Mis gustos son muy variados yconforman uncanon ecléctico. Adoro a Antonio Orejudo, a Almudena Grandes,Domingo Villar, aamericanos como Auster , Philip Roth o Don Winslow,francesescomo Lemaitreo FredVargas, y , sin olvidar la nómina de leoneses , losque ya están en elOlimpo ( Mateo Díez, Aparicio o Merino ) y los nuevos: NoemíSabugal o Ana Flecha Marco, una leonesa en el exilio que ha escrito una joya de cien páginas titulada Piso Compartido.

– ¿Es lector de la novela negra o sólo le gusta a la hora de ponerse a escribir?
– Leo muchanovela negra y escribo solo novela negra. Esto tiene queverprobablementeconmis limitaciones literarias, perotambiéncon una elecciónconsciente: este género es un molde amplio quepermite laindagaciónsocial, política,o psicológicaademás deplantear, tras la trama , cuestiones universales: la violencia, el mal, el deseo, la pérdida, la búsqueda.

–Ese género ya lo cultivó en sus anteriores novelas, pero… ¿ha cambiado mucho su escritura desde 'La conspiración de las mariposas' hasta ahora?
– Hay uncambio radicalenelestilo. Minimalismo,frase corta, estilo sintético y elhumor, que era un elementoesencial ,ha desaparecidoporcompleto en estaocasión. El punto devista, en3ª persona, se sitúa más cerca de unmodelo clásico. El propósito es crear unaobraaparentemente sencilla, de una lectura fácil, pero con la profundidad suficiente como para que el lector no haga pie siempre. Otros dirán si lo hemos conseguido o no, pero es un texto muytrabajado.Hastaseisversiones hasta llegar a ladefinitiva. Un tal Mr Griffintiene buena culpa de ello.

–¿Qué es lo que más les va a sorprender a los lectores de 'El secreto del Lettsworth'?
– A los que ya me conocían, probablemente el estilo: la concisión, la frase corta, una narrativa que funciona casi por acumulación. A los nuevos, niidea. Pero espero que la novela funcione como unchute de heroínaque telleve a un viajedel que no te quieras bajar hasta la última línea.

– ¿Por qué le atrae más escribir de lo que pasa en Nueva Orleans que lo que pasó en Toldanos?
– En realidad, podría pasar en Toldanos,solo nosfalta el Misisipipara ser Luisiana.Y en todas las comunidadesseescondensecretos poco edificantes. El ocultarlos o silenciarlos adecuadamente es uno de los pilares de eso que llamamos la convivencia. Pero la familia no me hubiera permitido manchar la doradareputación de mi pueblo. Es ese sentido hay muchonacionalismo toldaniense enmi casa.

– ¿Se podría definir 'El secreto del Lettsworth' como una novela de personajes?
- Sí, la trama,siendo relevante como en todanovela negra,es una excusa siempre para indagar en la naturaleza de los personajes, en sus pecados y en susvirtudes, en sus taras. Que son las de todos nosotros,claro.

– Decía un buen amigo que "todo el mundo tiene derecho a pensar que su familia es la más normal": ¿Todas las familias guardan algún secreto que sale a la luz en el momento más inoportuno, como pasa en su libro?
– La palabra familia es maravillosa por su capacidad polisémica. Imagínese usted: la familia real yelculebrón Corinna, la familia política (pregúntese a Olona) y mipreferida, lafamiglia,que es eterna. La familia es una entidad compleja , esel último reducto de seguridad , el útero eterno de sus miembros, y,a lavez, puede ser también la semilla de todas sus desgracias . Y sí,claro, todas las familias guardansecretos inconfesables queconviene airear cuanto antes por razones de salud mental. Aunque , a veces, el peso de esos secretos sea imposible de soportarpara un solo individuo.Y por ello, se escondan en el olvido y el silencio. Lo primero es siempre la supervivencia.
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