De este modo, en 2021 se cerraron 2.569 compraventas de inmuebles en los pueblos de León. Unas cifras que suponen prácticamente la mitad de las transacciones que se cerraron en toda la provincia, en un año en el que se alcanzó un total de 5.260 viviendas traspasadas.
El alza de las transacciones se está produciendo tanto en pequeños municipios como en cabeceras de comarcas El pasado año sirvió así para consolidar el aumento de la demanda en la vivienda rural. Concretamente, en el bienio 2020-2021 se incrementó en algo más de un 25 por ciento la compraventa de inmuebles en los pueblos de la provincia con respecto a los dos años previos a la llegada del Covid. De las 3.452 compraventas a las 4.443 de los dos últimos ejercicios completos.
En la provincia ya se venden casi tantas viviendas en los entornos rurales como en los urbanos, considerando como tales a la ciudad de León, Ponferrada y San Andrés del Rabanedo. En 2018 el porcentaje de este tipo de transacciones en los pueblos no llegó al 43 por ciento del total y tampoco se alcanzó el 44 por ciento en 2019. De este modo, la crisis sanitaria y los confinamientos han incrementado en cinco puntos el cupo rural, que se situó en el 49,4 por ciento del total de compraventas en 2020 y en el 48,9 por ciento en 2021.
Comparando estos dos bienios se advierte que la tendencia al alza en la compraventa de inmuebles en el medio rural leonés es claramente dominante. En Magaz de Cepeda se vendieron solamente dos casas entre 2018 y 2019 pero, con la pandemia del coronavirus, en los dos últimos años se han cerrado 13 transacciones. Este patrón se repite en más de 130 municipios leoneses: Cimanes de la Vega ha pasado de tres a una docena, Grajal de Campos de dos a ocho, Villazanzo de Valderaduey de cinco a 14 y Posada de Valdeón de una a cuatro.
Los mayores aumentos
El mayor incremento porcentual en las transacciones inmobiliarias de la provincia se ha registrado en el Ayuntamiento de Villaselán. Allí, se han pasado de cerrar solo una operación de este tipo entre 2018 y 2019 para alcanzar las siete en los dos últimos años. Los otros dos municipios leoneses con mayores aumentos en términos relativos han sido Gordaliza del Pino, que ha pasado de dos a cinco compraventas, y Almanza, donde han subido de cuatro a 18.
Desde que comenzase la pandemia se han cerrado más de 4.000 operaciones inmobiliarias en los pueblos En el lado opuesto de la balanza, los descensos más drásticos se han registrado en aquellos municipios que han pasado de dos o tres compraventas a ninguna. Comparando ambos bienios, en esta situación se encontrarían en Berlanga del Bierzo, Castrillo de Cabrera, Castrillo de la Valduerna y Valdemora.
El ayuntamiento con menos habitantes de León es también el único en el que no se ha cerrado ni una sola transacción inmobiliaria en los cuatros años de este estudio. En base a los datos ministeriales, en Escobar de Campos no se ha producido ninguna compraventa de vivienda desde el tercer trimestre de 2015.
En lo que respecta a cabeceras de comarca, el aumento en el número de transacciones inmobiliarias del bienio 2020-2021 también es generalizado. De este modo, se han registrado leves incrementos en Astorga o Cistierna, que han sido algo mayores en Sahagún, que pasó de 43 a 53, en Villablino, de 70 a 98, y en La Bañeza, de 140 1 73.
El mejor año en más de una década
León superó el pasado año las 5.000 compraventas de inmuebles, algo que no se producía desde el 2010 Sumando las transacciones inmobiliarias del entorno urbano y del medio rural, las 5.260 compraventas con las que León cerró el 2021 suponen el mejor dato en más de una década. La crisis inmobiliaria supuso un descenso drástico en este mercado, pasando de las 9.682 del año 2007 a prácticamente la mitad en el 2008: 5.956.
Desde el año 2010 no se había cerrado un ejercicio con tantas transacciones, un 2021 en el que el peso del mercado inmobiliario rural ha sido elevado. A excepción de 2020, con la irrupción de la crisis sanitaria del coronavirus, se ha experimentado una progresiva recuperación de este sector que tocó fondo entre 2013 y 2015, cuando no se alcanzaban las 3.000 compraventas anualmente.
