Mil cerezos más para Corullón

El Ayuntamiento de Corullón ha convocado una nueva edición del proyecto 'Mil cerexáis' por el cual se reparten entre los agricultores del municipio un millar de cerezos con el objetivo de regenerar el medio rural. 

Después de la buena acogida de la convocatoria anterior, el alcalde de Corullón, Luis Alberto Cobo, explica que se repite de nuevo la propuesta "para intentar cubrir muchas zonas de culuivo del municipio que estaban abandonadas y otras que estaban mezcladas con otros cultivos y huertas". De esta manera, se ofrece a los productores interesados una forma ordenada de plantación, enfocadas después a la Marca de Garantía de la Cereza del Bierzo. "Desde el Ayuntamiento, también estamos ayudando a los agricultores con la documentación para que los que después quieran formar parte de la marca, les sea más sencillo".

Los árboles para plantar son de cuatro variedades: california, burlat, navalinda y lapins.  Se han elegido variedades con ciclos largos de producción, desde mayo hasta julio, con mejor rendimiento. El año pasado se utilizó alguna variedad de picota que se produce en cotas más altas, para dar cobertura a terrenos de pueblos situados a más altitud como Hornija o Dragonte. 

Según el alcalde, en la pasada campaña, con el primer reparto se cubrieron cuatro hectáreas de terreno, y ahora se pretenden cubrir otras tantas. Los árboles que ahora se planten estarán ya en producción útil en aproximadamente cuatro años. También se está recuperando arbolado viejo. De este modo, en un plazo de cuatro o cinco años el municipio de Corullón producirá cerca de 150.000 kilos de cereza de calidad. 


La convocatoria ya se ha hecho oficial con su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia de León.
Los agricultores interesados disponen de 15 días para presentar sus solicitudes. El procedimiento para asignar los árboles será el de concurrencia competitiva entre todos los particulares que presenten su solicitud.

Para optar a estas ayudas, los solicitantes deben acreditar que ostentan la propiedad de fincas en el municipio, de forma documentada y por escrito. Las plantas entregadas deberán ubicarse en fincas situadas dentro del término municipal, siempre y cuando reúnan los elementos necesarios para su adecuada supervivencia y no se trate de terrenos forestales.