

León. Fueron muchos los que en mitad del tremendo dolor de la trágica muerte de Jorge Iglesias, con solo 20 años, dijeron que «jamás olvidaremos a Jorge y su ejemplo». Muchas veces ocurre y muchas veces llega después el olvido.
En el caso de Jorge, por suerte, aquel conjuro era cierto y su tremenda deportividad, su comportamiento en los corros y en la vida, su ejemplo silencioso pero visible ha hecho que el primer campeón de lucha leonesa del Bierzo siga en el corazón de mucha gente. Y de su familia, por supuesto.
Fruto de ese recuerdo imborrable es el documental titulado ‘Jorge Iglesias: un luchador’, que ha realizado el cineasta Rodolfo Herrero (Sotao de historias), con el guión y la colaboración absoluta de Antonio Barreñada y Carlos Iglesias, el padre de Jorge. Ya está acabado y después de un preestreno para pulir los últimos detalles ya va a ser estrenado, el próximo día de julio, seguramente allí dónde a Jorge le habría gustado que lo proyectaran, en Valdefresno, en la Sobarriba, la tierra que le acogió como luchador y cuyos colores defendió; aunque hay que decir que jamás renunció a inscribirse en los corros por Vega de Espinareda, que para eso era el primer campeón del Bierzo. Y con la excepción de Matallana de Torío, donde honraba a su madre defendiendo los colores de Orzonaga, su pueblo.
Después el documental girará por aquellos pueblos que muestren interés en acoger el recuerdo y el ejemplo de un chaval, un gran luchador, estudiante y joven deportista, que será muy difícil que le olviden porque la huella que ha dejado es muy fuerte, indeleble.