Así, los créditos a las administraciones se situaron en los 4.544,4 millones, un 23 por ciento más que en 2021, 850,6 millones de euros en términos absolutos; retornaron a niveles del año 2015 (4.653,3), y se aproximaron al máximo de 2014 (4.852,1). Las corporaciones públicas llevan tres años sumando créditos bancarios, desde los 2.938,2 millones de 2019, es decir, 1.606,1 millones más en tres ejercicios.
Mientras tanto, los créditos al sector privado apenas se elevaron seis décimas respecto a 2021, con 39.874,3 millones respecto, un dato que remonta a la Comunidad a la situación del ejercicio 2004, y se sitúa a años luz de su cénit en 2009, cuando alcanzó los 72.826,2 millones de euros. Los agentes privados contabilizan 380,7 millones menos en créditos que el año prepandemia.
En su conjunto, hay que remontarse a 2004 para encontrar un nivel de inversión crediticia global tan bajo en la Comunidad. Por el contrario, el ahorro ante la situación de crisis sigue superando récord tras récord, y se situó al cierre de septiembre en los 79.988,4 millones de euros, con un crecimiento del 3,7 por ciento en comparación a 2021, y volvió a alcanzar el máximo de la serie histórica. El ahorro público, 4.554 millones, descendió un uno por ciento respecto a su situación el año precedente, cuando también estuvo en máximos; y el privado alcanzó los 75.434,4 millones, un 3,9 por ciento más, con 2.890,7 más de aportación en 12 meses.
El sistema financiero de la Comunidad financia así otras economías con 35.569,6 millones de euros, que es la diferencia entre lo que ahorra y lo que invierte, otro dato en niveles récord.
Un análisis territorial revela que los depósitos bancarios de todas las provincias se elevaron el año pasado, con mayor intensidad en Palencia, un 6,1 por ciento y 5.483,7 millones de euros; y en Burgos, un 4,4 por ciento y 12.701,6 millones. Los depósitos en León y Zamora también crecieron por encima de la media regional (3,7 por ciento), un 3,8 por ciento, en concreto en ambos casos, con 13.848,4 millones de euros en la provincia leonesa, y 5.733,3 en la zamorana.
Por debajo de la media aunque también con subidas se comportaron los ahorros de los salmantinos, con un aumento del 3,6 por ciento y 10.680,8 millones; de los abulenses, 3,3 por ciento y 4.802,7; y de los segovianos, 3,2 por ciento y 4.761,2. Cierra la tabla Valladolid, con una subida del 2,7 por ciento y 18.052,3 millones, la cifra de ahorro más elevada entre las provincias.
Por lo que se refiere a la inversión crediticia, tuvo un comportamiento dispar. En concreto, descendió un 6,9 por ciento en Palencia, hasta los 2.029,6 millones de euros; un 2,1 por ciento en Ávila, con 2.122,6 millones; un 0,4 por ciento en Salamanca, hasta 5.540,9; y un 0,3 por ciento en Zamora, con 2.452,2. Por el contrario, se disparó un 7,9 por ciento en Valladolid y un 7,7 por ciento en Segovia, hasta los 13.766 y 2.716,6 millones de euros, respectivamente.
Los créditos también crecieron un 2,2 por ciento en la provincia de Soria y un 1,2 por ciento en la leonesa, con 1.758 y 6.853,6 millones de euros, respectivamente. Por último, en la provincia de Burgos permanecieron estables, con 7.178,2 millones de euros.
En cuanto el saldo entre créditos y depósitos, gana el ahorro con diferencia en todas las provincias, con León a la cabeza, con 6.994,7 millones de euros; seguida por Burgos, 5.523,4; y Salamanca, 5.139,9. Valladolid aparece en el cuarto puesto del ranking, con 4.286,2 millones de ahorro por encima de la inversión crediticia; Palencia aparece en el quinto, con 3.454,1 millones; y Zamora en el sexto, con 3.280,4. Por lo que se refiere a Ávila, los depósitos bancarios en la provincia superan a los créditos en 2.680,1 millones de euros; mientras que en Soria la cifra asciende a 2.165,9; y en Segovia, a 2.044,6.
