Villadangos se lanza a la Batalla. La villa paramesa celebra este fin de semana uno de los acontecimientos históricos más importantes de la provincia en la era medieval; un enfrentamiento entre dos grandes fuerzas, las de Urraca de León y las de su ex esposo, Alfonso I de Aragón, que determinó el devenir del Reino de León.
Corría el año 1111. El ejército del aragonés y los aliados gallegos de Urraca batallaron por el control del Viejo Reino en una encarnizada lucha que finalizó con la contundente, aunque amarga, victoria del aragonés, asumiendo la otra parte innumerables bajas. No obstante, el hijo de Urraca logró escapar. Éste sería Alfonso Raimúndez, o más conocido como Alfonso VII ‘El emperador’. A esta sangrienta batalla se le denominó también ‘La Matanza’, como herencia testimonial de lo que supuso el propio enfrentamiento, incluso para los habitantes de la Vía de Viadangos, tal y como se denominaba a la localidad paramesa en tiempos pasados.
Este hecho es el que se rememora todos los años en la villa, por el que Villadangos torna al Medievo cada mes de agosto. Por lo que lo hará, una vez más, este fin de semana, ante la presencia de damas, caballeros, juglares, trovadores, artesanos, campesinos y demás visitantes que podrán disfrutar, estos dos días, de una experiencia inolvidable.
Uno de los platos fuertes de la Batalla de Villadangos es el Mercado Medieval, que tanto sábado como domingo tiene su apertura a las 11:30. En él, además de los mejores artículos artesanos también estarán presentes las tabernas y los puestos de comida para saciar la sed y los estómagos de vecinos y visitantes, así como numerosos talleres de oficios artesanales, como la alfarería, la cantería o la industria textil.
Mencionar también el Campamento, que permite contemplar de cerca, entre otras cosas, el proceso de fabricación de la cota de malla, de escritura e iluminación medieval, la fragua y la herrería, así como también permite visitar el campo de entrenamiento de tiro con arco, la exposición de armamento y las tradicionales exhibiciones de cetrería. Las visitas tienen turno ambos días a las 11:45.
Además, la fiesta de la Batalla cuenta con una imponente ambientación musical y teatral por las calles de la localidad paramesa, así como con un torneo de caballeros el sábado y domingo a las 20:00, bailes medievales, desfiles y cortejos, así como con una cena medieval el sábado a las 23:00.
Pero, sin duda, las joyas de la corona de esta fiesta son, en primer lugar, la Recreación de la Batalla -el sábado a las 19:45-, y también la gran representación teatral sobre la vida y la corte del Reino de León del mismo día, una hora más tarde. Todo ello, además, impulsado por los propios vecinos de Villadangos, un valor añadido que da buena cuenta de la implicación de sus gentes, que apuestan, año tras año, por una feria de calidad, ofreciendo al visitante ocio y diversión, siendo siempre fieles a la historia de los hechos que la motivan; pilares que hacen de la Batalla de Villadangos uno de los referentes del verano leonés, en un marco, además, bañado por el Camino de Santiago, con el que la localidad mantiene un estrecho vínculo ya desde tiempos inmemoriales.