El céntrico establecimiento hostelero de la calle Cervantes acoge desde este lunes la exposición temporal con las once obras finalistas del X Certamen de Artes Visuales Camarote Madrid 2024, del que a finales de esta semana se conocerán los ganadores y cuya entrega de premios está prevista para los últimos días del mes de agosto.
En esta ocasión se han recibido 212 obras entre pintura, acuarela, fotografía e ilustración, con la participación de 92 artistas de 20 provincias. Las once obras seleccionadas son: ‘La gaviota’, fotografía de 80 x 80 cm del cacereño Tete Alejandre; ‘La carrera de los lentos’, fotografía de 80 x 60 cm del leonés Javier Casado; ‘Seijaku VI’, acrílico sobre tabla de 80 x 80 cm del asturiano Néstor López; ‘Vano’, óleo sobre lino de 60 x 80 cm de la vizcaína Amaia Suberviola; ‘Autovía’, acrílico sobre tabla de 80 x 80 cm del valenciano Pascual Gimeno: ‘Après toi’, óleo sobre tabla de 81 x 100 cm de la leonesa Paula López González-Vallinas; ‘Colada marina’, acuarela de 81 x 100 cm del granadino José María Sánchez; ‘S/T’, fotografía de 80 x 60 de la leonesa Julia González Líébana; ‘S/T’, mixta sobre lienzo de 92 x 73 cm de la leonesa Silvia Sánchez Gándara; ‘La mata’, óleo sobre tabla de 90 x 60 del leonés Germán Aparicio, y ‘Tienta noctuna’, pastel y carboncillo sobre papel de 90 x 60 cm, del ilustrador leonés Toño Benavides.

Se advierte en esta décima edición una mayor presencia de artistas leoneses, entre ellos el ilustrador Toño Benavides, cuya obra ‘Tienta nocturna’ se encuentra entre las once finalistas. Benavides espera no jugar en desventaja frente a la pintura o la fotografía, «porque a estas alturas de la película la ilustración ya es percibida al nivel de cualquier otra disciplina artística». Sobre la obra que presenta, ‘Tienta nocturna’, comenta que «en Andalucía se conoce como ‘hacer una luna’, que es ni más ni menos que el tentar a los toros cuando hay luna llena como toreros furtivos», señala su autor. «No tiene nada que ver con una declaración de amor a la tauromaquia, que no es el caso, sino con otra cosa, una costumbre culturalmente bien conocida y aceptada por todo el mundo que tenía que ver más que nada con la necesidad de buscarse la vida de los chavales, que no tenían otra posibilidad y que aspiraban a ser figuras del toreo».
Toño Benavides continúa incorporando nuevas imágenes a su macroproyecto sobre las leyendas de León, ya que existe el proyecto de conformar un bloque expositivo de medio centenar de piezas para hacerlo girar por toda la provincia y que espera poder concluir a finales de este año.