Manuel Blanco Romasanta es uno de esos personajes a caballo entre la realidad y la leyenda que, indefectiblemente, se acaba convirtiendo en una leyenda por más que siempre se recuerde que "basada en la realidad" o como anuncia la primera película sobre él, ‘El bosque del lobo’: "Basada en hechos reales".
La verdad es que fijándose simplemente en las definiciones que se dan de su persona es imposible que no despierte curiosidad. Los titulares de las artículos, libros o estudios que hablan de Romasanta son, entre otros: "El hombre lobo de Allariz" (el más repetido bajo el epígrafe de lobisome, en expresión gallega); "el primer asesino en serie de la historia de España"; "el sacaúntos de los bosques"; "el buhonero solitario"; "el primer ciudadano español diagnosticado de licantropía clínica"; "el criminal hermafrodita"; "el criminal indultado por la Reina"... Aún quedan más pero imagino que estos ya son suficientes para que, cuando menos, despierte curiosidad la biografía de Manuel Blanco Romasanta (Regueiro, Esgos, 18 de noviembre de 1809 - Ceuta, 14 de diciembre de 1863). La muerte en Ceuta se debe a que allí cumplía condena y falleció de cáncer.
Una figura así ha despertado la curiosidad de numerosos estudiosos en todos los ámbitos, ha protagonizado libros ( como Romasanta, la leyenda del hombre lobo, de José Rosillo); películas (como 'El bosque del lobo', de Pedro Olea con José Luis López Vázquez como protagonista o Romasanta. 'La caza de la bestia', de Paco Plaza); tiene un grupo de fieles estudiosos agrupados en el llamado Territorio Romasanta y en estos días se anuncia una nueva cita en el ámbito universitario, con un congreso dedicado a su figura.
Como contaba La Voz de Galicia en sus páginas dedicadas a Ourense: "La UNED de Ourense desarrollará entre el 15 al 30 de marzo un programa centrado en la figura de Manuel Blanco Romasanta, el hombre lobo confeso que, nacido en Esgos en 1809, se considera el primer asesino en serie español con repercusión mediática internacional. Según confesó —durante el proceso judicial que se siguió en su contra— había devorado a trece personas, aunque en la condena a cadena perpetua dictada en el año 1854 por la Audiencia de A Coruña se le reconocieron solo nueve asesinatos. El curso de la Uned abordará el caso desde un enfoque multidisciplinar centrándose en la visión histórica y en la jurídica...".
Uno más.
Y todos los estudios, biografías, abordan los primeros pasos de Romasanta como criminal confeso, y ahí nos lleva hasta El Bierzo pues "La primera acusación de asesinato le llegaría en 1844 por la muerte, cerca de Ponferrada, de Vicente Fernández, un alguacil de León que pretendía cobrarle una deuda. Tras ser condenado en rebeldía a diez años de prisión, consiguió escaparse a un refugio en el pueblo abandonado de Ermida. Allí convivió con el ganado durante meses". En esta reaparición se hacía llamarAntonio Gómez, otro de los ‘apodos’ por los que fue conocido.
Comenzó a rondar por Ponferrada al quedarse viudo y ejercía de buhonero entre Portugal, Galiciay las comarcas vecinas de León. Buena parte de sus compras las realizaba en una importante comercio ponferradino, el de Miguel Sardo, con el que llegó a tener una importante deuda de 600 reales. Para cobrársela interceptó a Romasanta el alguacil Vicente Fernández (al parecer natural de Pardavé) en el verano de 1843. Quería Fernández incautarle el género y Romasanta cometió así el primero de los numerosos crímenes que se le atribuyeron y él mismo confesó.
Después desapareció y no se le atribuyó este asesinato hasta que fue juzgado por los otros crímenes y confesó este primero en tierras leonesas, donde nada se supo de él salvo la declaración de una tabernera de Brañuelas, que explicó que "un gallego muy nervioso y hambriento se había presentado en su negocio para comprar alimento, que le dio de comer pan, pimientos y un cuartillo de vino, y que el gallego siguió su ruta apenas sin abrir la boca".
Sin duda el aspecto más llamativo de su biografía era su licantropía, esa transformación en lobo que le llevaba a matar (como los lobos), aunque nada tuvo que ver con el caso de Ponferrada, que era por dinero. Su complicada personalidad alimentó numerosas teorías y estudios: "Nació como Manuela y se cree que fue criado como una niña hasta los ocho años, cuando fue modificada su partida de nacimiento a Manuel" . "Era de aspecto físico normal, bajo, medía sobre 137 centímetros, rubio y de facciones suaves o femeninas, incluso tiernas". "Sabía leer y escribir, cosía y bordaba, por lo que fue sastre u, otros dicen que modista..."
Entre los numerosos estudios que protagonizó llama la atención uno relativamente reciente, de 2012, en el que Fernando Serrulla, forense del Instituto de Medicina Legal de Galicia, le diagnosticaba un trastorno genético de intersexualidad. Explicaba en el diario El País: "El pseudohermafroditismo femenino solo se manifiesta en uno de cada 10.000 o 15.000 nacidos vivos. He visto casos de niños o niñas que, antes de quedar inscritos en el Registro Civil, necesitan un reconocimiento para determinar su sexo. Romasanta tenía sexo de mujer pero segregaba una cantidad desmesurada de hormonas masculinas y sufrió un proceso de virilización; estas personas, debido a los andrógenos, pueden presentar episodios de fuerte agresividad". Lo que podría explicar sus numerosos crímenes.
Manuel tenía buena formación para la época y capacidad de convicción; así sus primeras víctimas —al margen del alguacil— serían una vecina, Manuela, de 47 años, y una hija, separada. Vendió lo que tenía y marcharon con él en busca de un trabajo que les prometió en Santander en casa de un sacerdote amigo suyo. Cuando regresó semanas después tranquilizó a las hermanas de Manuela y les ofreció una buena ocupación junto a ella; tampoco volvió a saberse nada ni de ellas, ni de sus hijos que las acompañaron.
Los vecinos las creían en Santander, donde jamás llegaron; él las mató, ¿convertido en lobo?El decía que sí, así lo declaró en la causa: "La primera vez que me transformé fue en la montaña de Couso. Me encontré con dos lobos grandes con aspecto feroz. De pronto, me caí al suelo, comencé a sentir convulsiones, me revolqué tres veces sin control y a los pocos segundos yo mismo era un lobo. Estuve cinco días merodeando con los otros dos".
Como lobo. Y como lobo mataba.
Sacaúntos, asesino en serie, licántropo, lobisome, buhonero
Romasanta, el considerado primer asesino en serie de España y cuyo primer crimen fue en Ponferrada, protagoniza un curso de la Uned en Ourense
14/03/2023
Actualizado a
14/03/2023

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