La exposición consta de una serie de grabadoscon origen en 1981 y que hace pocos años fueron reelaborados con nuevos métodos y técnicas a partir de las matrices originales. El origen de esas matrices son los interiores de distintas catedrales, entre ellas está la catedral de Burgos, la iglesia de Portugalete y comenta: «Esto lo hice en una época en la que vivía en Bilbao y especialmente de Burgos porque Concha, mi mujer es de Burgos e iba mucho allí».
Explica que lo más difícil fue conseguir los permisos para fotografiar el interior de la catedral porque estaba totalmente prohibido, pero los consiguieron e hicieron las fotos con trípode, él mismo las reveló en blanco y negro y posteriormente fueron procesadas en alto contraste a fotolitos. El fotolito de alto contraste fue rayado con una punta de acero y una vez rayado, pasado a una plancha de cinc pre-sensibilizada, con insolación, revelada y luego mordida. Un proceso muy laborioso.
No hacía las ediciones completas que señalaba la numeración. Y este proceso lo comenta así: «El origen de esta serie es en 1981 cuando a mí me interesaban mucho los espacios interiores de las catedrales porque son espacios que siempre me han parecido lugares que a lo largo del tiempo han acumulado historias que les dan un carácter mágico, de ahí el título ‘Las catedrales mágicas’ y para hacerlo utilicé recursos inusuales en aquel tiempo como la técnica que se ha usado aquí, que es un proceso de origen fotográfico, pero elaborados los clichés manualmente y con una técnica que se llama grabado al aguafuerte en relieve y además en alguna de las matrices con mordidas hasta perforar las planchas».
Estas matrices tienen tal riqueza y tal complejidad que, en este caso, bastantes años después, como es lógico, las ha vuelto a coger y ha hecho una nueva edición, en la que introduce aspectos nuevos, elementos brillantes que aparecen en las imágenes actuales, elementos incorporados a posteriori sobre la imagen una vez estampada.

El autor se pregunta: «Tienes unas matrices estupendas, ¿por qué no haces ensayos y buscas otros aspectos que no estaban en esa primera edición?». Y ahí aparece esta nueva serie que respeta el año de edición de la producción de la plancha, respeta la numeración.
Las piezas con el tratamiento posterior son similares, pero no idénticas, porque lo importante es que contienen los mismos elementos con los mismos colores y en los mismos sitios. Por ello cada una es única, aunque partan de la misma fuente. Y añade: «una curiosidad es que yo descubro estos elementos brillantes espectaculares en las camisetas de las chicas». Se trata de una pasta muy densa que se aplica y se puede lavar, por eso se coloca en las camisetas.
Pepe expone sus obras y Ana Pedregal de ‘A punto’, una empresa puntera en reforma de espacios habitacionales, en especial de interiores habla sobre las obras de este gran artista: «a mí me gusta integrar en mis reformas obra de autores conocidos e importantes y Pepe Fuentes lo es, un referente de ámbito internacional que puede estar en la sala de cualquier vivienda que pueda ser remodelada con nuestros diseños. Un valor añadido a la modificación de la vivienda.
Tanto Pablo de Macondo, como Ana Pedregal y Pablo Martínez, coordinador de la exposición, están muy satisfechos por el resultado de la muestra del genial artista Pepe Fuentes que ha iluminado todo este tiempo con sus ‘catedrales mágicas’ los locales que ambos tienen en la calle Serranos, en el entorno del barrio de Santa Marina y la plaza del Espolón.
Aún estamos a tiempo para conocer la obra de Pepe Fuentes, un gran artista, pues el día 1 de julio finaliza.