La escritora e investigadora maragata Mercedes G. Rojo presenta este jueves a partir de las 19:30 horas en la sala Región del Instituto Leonés de Cultura el libro ‘Cuatro poemas inéditos de Manuela López García para la BBC de Londres’, que al igual que las tres publicaciones anteriores sobre la figura y la obra de la maestra, poeta y escritora cacabelense ha sido editada por el sello leonés Ediciones del Lobo Sapiens, siendo este el cuarto libro de una colección iniciada con ‘Manuela López García. Una vida una obra’ (2021) y continuada con ‘Soñando infancias. Poemario (in)completo de Manuela López García’ (2022) y ‘Rescatar el olvido. Poemario íntimo de Manuela López García’ (2023). La autora estará acompañada en la primera de las presentaciones previstas de ‘Cuatro poemas inéditos de Manuela López García para la BBC de Londres’ por Jacobo Llamas Martínez, profesor de la ULE, y Elvira Martínez Ropero, profesora de Secundaria y una de las artífices de la recuperación de mujeres escritoras que desde 2018 viene coordinando la investigadora astorgana.

Cuatro publicaciones en tres años (cinco si tenemos en cuenta el trabajo de recuperación de dos fábulas de la autora berciana, también inéditas, en la revista del IEB del año 2021) pueden parecer muchas pero la impulsora y ‘alma mater’ del proyecto, Mercedes G. Rojo, se apresura a decir que estamos todavía en la punta del iceberg. «Manuela López García era una mujer muy completa, la verdad. Son cuatro libros y un trabajo que se publicó en 2021 en el Instituto de Estudios Bercianos sobre dos fábulas inéditas y que es de lo poquísimo que Manuela López tiene escrito en prosa. Pero como te decía esto es solo la punta del iceberg», sostiene la escritora e investigadora astorgana, cuyo conocimiento de su homóloga berciana le llega a través de los proyectos de recuperación iniciados en marzo de 2018 y que en un principio no era más que un acercamiento a modo de homenaje por parte de un grupo de escritoras y artistas plásticas «a mujeres que anduvieron por el camino», siendo la primera de ellas Concha Espina, a la que se dedicó una exposición, seguida de Josefina Aldecoa, que también tuvo la suya y un concurso destinado a la gente joven que Mercedes G. Rojo adelanta que se retomará este año, y Alfonsa de la Torre, una segoviana de la localidad de Cuéllar. «En 2021, después de haber sacado un libro recopilatorio sobre todo mi proyecto de Concha Espina, que se prolongó durante casi dos años, decidí que era el momento de volver la vista a esos otros personajes leoneses que tenían mucho que contar pero que no se encontraba nada de ellas. Y la primera que me vino a la cabeza fue Manuela López García. ¿Por qué?, pues porque compartimos ‘tierra’. Ella estuvo casi veinte años viviendo en Astorga, en la residencia de la Casa Sacerdotal. En aquel momento yo no coincidí físicamente con ella pero sí que coincidí literariamente, porque a través del Centro de Estudios Astorganos ‘Marcelo Macías’ yo conocía su obra, habíamos participado las dos (cada una por su lado) en el concurso ‘Voces de mujer’, que entonces llevaba la Concejalía de Servicios Sociales, y en un libro recopilatorio que hablaba de todo eso descubrí que teníamos cosas en común», recuerda la autora astorgana, que pudo ahondar en la obra de Manuela López tras conocer que se encontraba depositada en Cacabelos. «Me entra la curiosidad, me apetece contrastar lo que ya tengo con lo que hay y cuando entro en el archivo después de que el primer libro ya estuviera en la calle me doy cuenta de que lo que conozco, que es prácticamente todo lo que hay publicado de ella, es solo la punta del iceberg de lo que existe. Pido permiso para estudiarlo, para clasificarlo y me paso más de un año investigando en el archivo de Cacabelos. A partir de ahí es cuando decido que a lo mejor es el momento de empezar a recopilar todo este material para darle una nueva vida, buscando otras cosas que no están publicadas, y es cuando empiezo con este proceso de recuperación que va a dar como resultado ‘Soñando infancia’, ‘Rescatar el olvido’ y ‘Cuatro poemas inéditos’».

Sobre este último libro que se presenta el jueves en el ILC, Mercedes G. Rojo recuerda que fue el hijo mayor de la autora cacabelense quien le pone sobre la pista de un material inédito en forma de grabación de audio que Manuela realizó a finales de los ochenta sobre unos poemas inéditos que en la década de los cuarenta había enviado a la BBC de Londres por mediación de Alexander Easton, conocido como Mr. Easton, un espía inglés con casa cerca de Cacabelos que la invita a participar en aquellos programas radiofónicos en español que se emitían desde Londres para la resistencia española. «Ella le manda una serie de poemas que hacen llegar a la emisora vía valija diplomática. Cuando su hijo le pregunta años más tarde por Mr. Easton dice no recordar demasiado del personaje, pero sí consigue retener en su memoria estos cuatro poemas que son muy interesantes porque nos dan una visión de Manuela totalmente diferente. La única manera de salvar estos poemas fue a través de la memoria porque no los guardó escritos, como también ocurría a otros poetas que vivían bajo la dictadura», sostiene la investigadora, que a la hora de explicar la naturaleza de estos poemas comenta que «con una ironía de lo más fina que te puedes imaginar lo que hace es analizar lo que está sucediendo en Europa, hasta el punto de convertir a Hitler en el protagonista de dos de ellos», señala González Rojo.

La investigadora y escritora astorgana también hace alusión al cuarto poema titulado ‘Lo que perdí, lo que estoy perdiendo y lo que perderé’, que escribe cuando los aliados van ganando terreno en la guerra contra el nazismo y bien informada del curso de la guerra a través de las emisoras ‘clandestinas’ refleja aspectos del dictador alemán que ahora conocemos como su querencia por Baviera, por la música de Wagner o por ‘pintar cuadrines’, como ella dice. «De paso que critica aHitler va criticando una situación paralela, que es lo que sucede en su propio país pero sin poder hacerlo de manera abierta porque, como viuda de ‘rojo’ que era, estaba en el punto de mira del régimen».
Otro ejemplo de ello es su crítica a la imposición del castellano por parte de Franco, que Manuela López refleja con sutil ironía en el poema ‘Ondi jueron los tiempos dantoncis’. En el caso del antes citado ‘Lo que perdí...’ lo que hizo fue poner letra a un conocido tango de la época y de hecho –comenta la investigadora– la autora berciana «no lo recita en la grabación sino que lo entona, lo canta, con cierta dificultad porque es el poema más extenso de los cuatro».