María Lafuente se presenta en esta nueva edición de la pasarela con una “propuesta de patrones retro-futurista y casual” donde las lineas y estructuras son “arquitectónicas” pero a la vez “fluidas”, combinadas con un modelaje que hacen recordar esa relación entre causa efecto por la que discurre el diálogo de la diseñadora con las prendas. De hecho, en su propuesta cita a Jorge Luis Borges al asegurar que “… lo que llamamos azar es nuestra ignorancia de la compleja maquinaria de la causalidad…”.
Lafuente presentó su propuesta en La Nave, la antigua fábrica de Boeticher en Madrid y uno de los espacios denominados ‘off’ de esta pasarela porque se desarrollan fuera del recinto oficial de Ifema, y donde reunió a cerca de 300 personas entre profesionales y aficionados a la moda que admiraron los diseños con devoción.
En esta colección “hay mucha innovación” aseguró Lafuente en declaraciones a los medios de comunicación tras recibir la ovación de los asistentes tras la presentación. En ellas confesó “haber cumplido un sueño” de la mano del Museo del Prado nada menos que con el material que ha servido para conmemorar el bicentenario de la pinacoteca, y que ha permitido “llevar estas lonas a la pasarela en busca de la sostenibilidad y el valor artístico”, dijo.
Son diseños en su mayor parte elaborados en tonos discretos, sin estridencias, con colores blanco, beige, rosa , cereza, negro y marino, que se acompañaron con complementos brillantes y en tonos oro que realzaban el contraste de los tejidos, además de otros detalles florales que Lafuente no descuida, como tampoco los accesorios como gorros, bufadas y toquillas tejidos en lana.
Colaboradores
La colección diseñada por Maria Lafuente es producida en conjunto con las mujeres de los talleres de costura de APRAMP en un “trabajo creativo altamente simbólico y gratificante, enfocado en su empoderamiento”.
Según se informó desde el taller de diseño, los tejidos son sostenibles como el tencel, certificados por PEFC de Textil Santanderina. Las piezas de Neulaser (neumático reciclado Signus) y de Petsilk (reciclado de las botellas PET de la escuela de innovación AEG), aportan innovación e investigación. El calzado ha sido diseñado también por María Lafuente y fabricado por Mimao.
Para la escenografía Lafuente recurrió a los contenedores reciclados de Street Box y con la participación del grupo TOOM PAK, que combina percusión con la comedia visual y el ritmo combinados en un espectáculo musical. Una propuesta teatral donde la basura y los residuos se convierten en belleza y las botellas en instrumentos musicales. Para la música se contó con la composición en exclusiva de David Dalmau.
“Soy atrevida, intrépida, me gusta innovar” apuntó la diseñadora, convencida de que se puede conseguir que exista la belleza a través de materiales que a priori no parece que exista, como es el caso de estas lonas del Prado, “ese es el reto” apuntó. De ahí el título, una ‘Causalidad’ que representa la ley de causa y efecto, “el fruto y la semilla que no es fruto del azar”. “La semilla es buscar la materia que parece que no tenga una utilidad, para llegar a este fruto”, remarcó.