Para Carlos Núñez actuar en León siempre supone «una fuerte emoción» ya que «León es el mejor público del mundo y siempre nos ha apoyado desde el inicio». Por otro lado, el músico vigués señala que «toda la provincia de León da una gran importancia a la música de este tipo de raíces» y por eso el concierto de León es uno de los más grandes que ofrecen en España junto a los del cierre de gira en Barcelona y en Madrid.
Un concierto en el que se pretende disfrutar de las músicas autóctonas en un recorrido musical en el que participarán músicos internacionales como el gran violinista americano Jon Pilatzke y toda su banda habitual. Todo ello hará que el concierto se convierta en «una gran fiesta celta». Carlos Núñez considera a León como el punto de unión entre el mundo celta, lo atlántico y lo celtíbero, en definitiva «conectar León con el mar porque desde León se ve el mar».
Además, le acompañaran una serie de artistas locales como Tsacianiegas, un grupo formado Laura y Raquel Álvarez, dos chicas astur-leonesas que realizaran la Danza Prima, un tipo de danza prehistórica que será «una iniciativa amorosa expresada a través del canto y la danza junto a la melodía de Ramo Verde».
También se hará todo un homenaje a las pandereteras de Nocedo de Curueño María, Estefanía y Ceferina. Unas mujeres que nos dejaron el legado de «unas canciones bellísimas y antiquísimas» y a las que ahora quiere recordar junto a al grupo local de pandereteras 'Repiquete'.
En el Auditorio también estará el acordeonista berciano Borja Rodríguez con el que interpretarán una serie de ritmos binarios llamados ‘Titos’ y una selección de dulzaineros locales con los que ha preparado una diversas melodías tradicionales con unos arreglos que hacen que «parezca música de película», según Carlos Núñez. No faltará tampoco la banda de gaitas Ciudá de Llión, el Orfeón Leonés y el músico tradicional Rodrigo Martínez.
Carlos Núñez está considerado internacionalmente como un músico extraordinario, de los más serios y brillantes del mundo… Su carisma, su energía, su espíritu pionero lo han hecho muy popular, transcendiendo con creces los límites habituales de sus instrumentos: la gaita y las flautas.
A lo largo de estos años, Carlos Núñez ha vendido más de un millón de discos en el mundo, ha obtenido un Premio Ondas, dos candidaturas en solitario a los Grammy latinos y galardones en todo el mundo. Ha sido nombrado Embajador Europeo del Medio Ambiente y ha actuado en Roma ante dos millones de personas convocadas por el Papa. Ha sido definido como «la única estrella planetaria de la gaita» , «el nuevo rey de los celtas», «el Jimi Hendrix de la gaita» (Billboard), «el gaitero de oro», «artista de una musicalidad sobresaliente y un talento inteligente» o «gaitero como si tocase Coltrane o Hendrix».
25 años de A Irmandade das estrellas
Su primer disco en solitario ‘A Irmandade das Estrellas’ cumple ahora 25 años, un trabajo que se grabó con las mejores técnicas acústicas del momento en Dublín y vendió más de 100.000 ejemplares en España, "poniendo las músicas tradicionales en el mapa" . En ‘A irmandade das estrellas’ colaboraron más de 50 músicos, entre ellos The Chieftains, Ry Cooder, Luz Casal y Dulce Pontes y fue reeditado en una edición especial por su aniversario en la que participaron artistas como Rozalén, Los Piratas, Iván Ferreiro o Tanxugueiras.
A lo largo de toda su trayectoria su música ha vivido en un constante proceso de innovación e adaptación como es el caso de su ‘Danza de Espadas’ en la que colabora con un un joven Dj para combinar la danza y la melodía tradicional con los sonidos urbanos de la actualidad. También destaca el concierto que ofrecerá en París con músicas celtas de Beethoven.
Carlos Núñez considera la música celta como «una música de más de 3 siglos que vive en constante renovación con la tradición atlántica. Además es un género que se ha interpretado de todas las formas posibles, tanto con elementos rockeros como electrónicos».
Por otro lado, también señala que «la música celta siempre estará ahí» y «hay que hacer el esfuerzo para entender esas nuevas formas de entender la música y el trabajo» ya que en la actualidad «la gente joven está más abierta experimentar con la tradición y con la música en general».