Tras dos años de restricciones como consecuencia de la pandemia, el Festival Internacional ‘León Vive la Magia’ ha recuperado este martes en la presentación a los medios su carácter teatral a través de una sencilla puesta en escena que ha tenido como escenario el Teatro San Francisco y como actores principales al director artístico Juan Mayoral y en representación de las instituciones participantes en el gran evento lúdico-cultural del invierno leonés al alcalde de León, José Antonio Diez, a la viceconsejera de Acción Cultural de la Junta de Castilla y León, Mar Sancho, al subdelegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez, y al coordinador de Proyectos y Actividades Culturales del Instituto Leonés de Cultura, Emilio Gancedo.
Con apenas variaciones respecto al organigrama de anteriores ediciones, donde la gala internacional en el Auditorio Ciudad de León volverá a convertirse en el gran escaparate del festival con la presencia de algunos de los mejores magos del mundo, León se llenará de magia coincidiendo con la Navidad, unas fechas que invitan a la ilusión –tan necesaria en estos tiempos de incertidumbre que nos ha tocado vivir– y que no ha perdido en ningún momento Juan Mayoral, aunque en su caso también pese mucho la responsabilidad de mantener el listón del certamen en lo más alto. «Cada vez que me enfrento a una nueva edición de ‘León Vive la Magia’ lo primero que siento es una gran satisfacción, una felicidad absoluta. Y después de la pandemia, el volver al festival como ha sido desde siempre me produce un enorme placer pero al mismo tiempo es una responsabilidad muy grande. Son 19 años en los que creo que lo hemos hecho bien. El público nos quiere, el público nos sigue, y por ello el listón está muy alto. Por aquí han pasado artistas de un nivel tan elevado que el superarlos es una tarea complicada. Siempre tratamos de buscar lo último, lo más novedoso, lo imposible, lo increíble, y ese es mi reto y mi responsabilidad», sostiene Mayoral. El director de ‘León Vive la Magia’ es consciente de que el festival encontró hace ya tiempo la fórmula del éxito, fruto de la combinación entre la magia de los grandes maestros y esos números más acordes a los nuevos tiempos que a menudo consiguen impactar al espectador, por lo que no es necesario introducir grandes cambios, aunque sí muy pendientes de lo que el sector está dispuesto a ofrecer. «La magia clásica son los maestros, gracias a ellos somos lo que somos hoy en día y siempre tienen que estar ahí, como Beethoven o Chopin en la música, porque en realidad son las señas de identidad de ese arte», argumenta el director artístico de un festival que en tiempos de crisis como los actuales ha hecho una decidida apuesta por el humor, por lo que esta edición va estar repleta de números que invitan al asombro pero también a la risa, la mejor manera de evadirse de la compleja realidad cotidiana. «Yo creo que para eso estamos. Ese es nuestro auténtico motor, lo que mueve el engranaje de la ilusión. Y sobre todo reírnos mucho, que es muy bueno para la salud. Varios números en la gala internacional y en la ruta de la magia son de carácter eminentemente humorístico o cómico, magia pero con risa, con sonrisa. Eso es bueno para la salud y es más necesario que nunca», destaca Mayoral, que no se quiere mojar a la hora de adelantar qué números de la presente edición de ‘León Vive la Magia’ van a ser los que más van a impresionar al público. «Los gustos son muy diversos, por lo que prefiero no hacer pronósticos porque existe un abanico de variedad muy grande. Considero que todos son parte de un puzzle, todas las piezas encajan y al final tenemos una composición que el espectador después de un espectáculo de dos horas se sorprende de lo rápido que ha pasado».
En 2023 el Festival Internacional ‘León Vive la Magia’ cumple 20 años, por lo que su director trabaja ya para que esa edición sea aún más especial. «Eventos ya tan consolidados como el Purple o como la magia son parte de la identidad cultural de una ciudad. Yo siempre digo que en León hay cultura mágica, lo cual no se puede decir de otras ciudades. Para mí es un lujo poder contar con una ciudad formada y preparada porque ha visto ya mucho. Eso me encanta. Cuando era niño y deambulaba por la calles del Barrio Húmedo nunca me imaginé que algún día fuera lo que estoy viviendo hoy, osea el sueño realizado», concluye.