El municipio leonés dio comienzo este viernes a su celebración de la uva, coincidiendo con un encuentro ya tradicional entre artistas procedentes de todo el mundo.
La vigésimo segunda edición de la Feria Vitivinícola y el Festival Internacional de Payasos fueron ayer la comidilla en boca de todos los vecinos de Gordoncillo. Arrancando con un pregón, responsabilidad del escritor y periodista Alfonso García, encargado de la iniciativa literaria ‘Letras en la Panera’, el ambiente festivo se fue fraguando este viernes para prolongarse durante todo el fin de semana.
En la primera jornada de celebración, ‘Este país es un circo’ de Mike Dosperillas fue punto de partida para las actuaciones de payasos que convierten estos días el municipio en una carpa de diversión y actividad que alivia el calor estival a base de ocio. Con una propuesta delirante, el artista mezcló artes circenses con el más puro teatro de calle y una buena dosis de humor. Aunque sí la primera, no es la única función enmarcada en este festival que toma Gordoncillo como escenario.
La tarde de este sábado está amenizada por varios espectáculos que divierten a vecinos y vecinas del municicpio en diferentes horarios. Vagamundos Teatro sube a escena ‘Papahuevo’ a las 18:30. La agrupación procedente de Málaga llega de la mano de un ser gigante, que se hace hueco en medio de la plaza del municipio en un viaje vital lleno de ternura y humor.
Le sigue a las 19:30 la compañía Circk About It con ‘Loop’. Afincado en León, el grupo integrado por Laura Barba, Miguel Molinero y David Tornadijo invita a reflexionar sobre cómo avanzar incluso cuando te quedas atrapado en el tiempo. Todo a través de un espectáculo de malabares que crean patrones repetitivos con un humor que convierte los minutos en segundos.
Finaliza la jornada de este sábado ‘Tranvía Nº 12’ de La Finestra Nou Circ a las 23:00. En plena Plaza Mayor de Gordoncillo, cinco personajes se reúnen en una particular parada de un antiguo tranvía. Un tranvía que siempre está pero que, por algún motivo, nunca se pone en marcha.
Kicirke se encarga de clausurar definitivamente el Festival Internacional de Payasos con su función ‘Souvenirs’. Un teatro de variedades inspirado en los espectáculos de vodevil y situado en los tiempos de precariedad, decadencia y posterior desaparición en los primeros años de la década de 1930.