
El Barrio Romántico comparte protagonismo con algunos muy conocidos, como La Latina, en Madrid, o Sants, en Barcelona. También aparecen otros menos famosos y a todos ellos recomiendan "ir antes de que se masifiquen".
Del leonés destacan que mantiene la estética del Barrio Húmedo y la variedad que tanto leoneses como turistas pueden encontrar en sus calles. "Hay clásicos, como la Taberna de Flandes, con una barra donde es casi imposible arrimar un codo; y modernos, como Clandestino Gastrobar, con paredes rotas y suelos de hormigón", advierten. También hay copas y música, "para digerir el embutido leonés". En definitiva, "al Romántico se llega de día y se sale de noche".