El misil que viene del aire

El martín pescador es un verdadero misil que se lanza en picado hacia el agua en busca de pececillos y otras presas

Javier Valladares
05/07/2017
 Actualizado a 18/09/2019
Un martín pescador a orillas del río Bernesga a su paso por el centro de la capital leonesa. | JAVIER VALLADARES
Un martín pescador a orillas del río Bernesga a su paso por el centro de la capital leonesa. | JAVIER VALLADARES
Una fría mañana del mes de enero salí con mi cámara en busca del martín pescador que habitualmente veía en mis paseos por la orilla del Bernesga, en pleno centro de León. No tardé en encontrarle soleándose, a pocos metros del salto del agua próximo al puente de ‘los leones’. Entre una maraña de ramas secas pude hacerle unas cuantas fotos ya que posó tranquilo para mi durante varios minutos. Esa foto es la que encabeza este artículo, con el que comienzo mi tercera temporada de colaboración con La Nueva Crónica de León.

El pequeño Martín Pescador es un auténtico misil. Cuandovuela a pocos centímetros del agua apenas nos da tiempo a verle, si no es porque su inconfundible y estridente canto le delata cuando pasa a nuestro lado esa auténtica flecha turquesa.

Hasta hace unos años estaba presente en casi todos los cursos fluviales de la provincia, aunque cada vez es más escaso, dada la progresiva eliminación de los taludes fluviales arenosos y su sustitución por escolleras de piedra, lugares estos primeros donde excava su nido a modo de galería. Por eso prefiere cursos medios de ríos con aguas tranquilas y claras donde pueda ver con facilidad a sus presas.

Sus vivos colores no le impiden pasar desapercibido, en especial los colores azules de la espalda con esos reflejos que le mimetizan en la superficie del agua.

La técnica de caza es siempre la misma. Desde una rama situada a poca altura sobre el agua desde la que observa a los pequeños peces, anfibios, cangrejos e insectos acuáticos, se lanza velozmente con una gran precisión, usando su largo y fuerte pico a modo de arpón. Una vez capturada la presa vuelve al posadero donde se dará su merecido banquete.

Normalmente los martines pescadores crían dos veces por temporada, usando para ello casi siempre el mismo nido, construido al final de una larga galería excavada en un talud sobre el agua, lo cual debería en teoría protegerlo de los depredadores, pero por desgracia los pollos son presa fácil.
Lo más leído