El arte de destilar con pasión y sin fronteras

Bunker Distillery, que tiene su fábrica en la localidad leonesa de Las Grañeras, sigue cosechando premios por todo el mundo gracias a un producto especialmente cuidado y a la calidad de las dos ginebras que salen de su alambique

L.N.C.
05/10/2018
 Actualizado a 12/09/2019
Enrique Lozano ‘a bordo’ de Cloe, su admirado alambique.
Enrique Lozano ‘a bordo’ de Cloe, su admirado alambique.
Capturar aromas y sabores, desde los más cercanos a los más remotos, es una de las grandes pasiones de Enrique Lozano. Los captura y los destila, algo que entiende y que practica como un arte desde Las Grañeras, entre peregrinos, paisajes de Tierra de Campos y mucha tradición, pero que él consigue exportar a todo el mundo gracias a la tenacidad de su trabajo y a la excelente calidad de los productos que obtiene. Bunker Distillery, que es como se llama el sueño que ha conseguido hacer realidad, ha merecido ya reconocimientos de medio mundo, desde la medalla oroen el China Wine and Spirits Awards a la medalla de bronce enla Berlin International Spirits Competition, pasando por la medalla de plata en el International Spiritst Change de Inglaterra o la medalla de bronce en el San Francisco World Spirits Competition.

Las dos ginebras de Bunker son craft, al ser elaboradas de manera artesanal y estar libres de azúcares y aditivos Antes de que llegaran todos esos reconocimientos, antes que el sueño empezara a hacerse realidad, Enrique Lozano se pasaba horas y horas investigando en su búnker de Las Grañeras, haciendo pruebas y más pruebas, hasta que decidió convertir su hobby en una pasión y lanzarse a convertir en realidad su sueño: «Invertí todo mi dinero en cobre y metal, adquiriendo un sueño, a ‘Cloe’, la joya de la corona de la destilería». Se trata de un alambique de la más alta tecnología, del cual existen sólo unos pocos a nivel mundial y que ofrece «la posibilidad de aplicar técnicas empleadas en perfumería, por ejemplo el arrastre de aceites esenciales», asegura el maestro destilador, al que le cambió su forma de trabajar después de adquirir este alambique: «Tras empezar a trabajar con ‘Cloe’ se abrió ante mí un mundo de posibilidades, ya que podía tener el control absoluto en cada proceso del destilado. Podía hacer realidad mi filosofía, amar y respetar el producto, proporcionándole el tiempo necesario para permitir aflorar su máxima calidad y ofrecer el resultado en forma de destilado», asegura al maestro, que desde sus primeros pasos en este oficio contó con el apoyo de la distribuidora leonesa Reycer.

Bunker Origen London Dry Gin
, una ginebra artesanal de autor «para los verdaderos amantes de la ginebra» y Bunker London Dry Gin, «un producto único y novedoso puesto que los botánicos naturales se maceran 8 días a temperatura controlada» son los dos productos que pone a la venta esta destilería leonesa. Ambas están sometidas a un proceso largo de maceración, lo cual no es nada común, y para Bunker es una maceración en un equipo con temperatura controlada. De hecho, la calidad se ha convertido en una seña de identidad, una obsesión, «tanto en las materias primas, maquinaria, botellas...».