Por octavo año consecutivo –salvo en el ejercicio de 2020 a causa de la pandemia–, ante la Puerta del Cordero de la Real Basílica de San Isidoro y presidido por el Pendón Real, el Pendón de Baeza y el Pendón de Velilla de la Reina, se ha procedido este lunes a la lectura pública de los Decreta promulgados por Alfonso IX en 1188, que ha incorporado por segundo año la entrega de los Premios Decreta 2023 a la rectora de la Universidad de Washington, Ana María Cauce, al representante permanente adjunto de España ante la FAO, Juan Prieto Gómez, y a la periodista y presidenta de la Casa de León en Madrid, Belén Molleda, que recibieron una pieza de terracota diseñada por la ceramista Marta Rivera, que está inspirada en el León medieval que aparece en un ejemplar numismático del tiempo de Alfonso IX.
El escritor y presidente de la Asociación Cultural Amigos de los Decreta, Juan Pedro Aparicio hizo alusión a unas palabras del escritor Chesterton, escritas hace casi cien años, en las que asegura que «España ha sido campeona del progreso y de la libertad», donde reconoce la procedencia española de la misma institución del Parlamento. «Cuando se toma la historia de España en conjunto se percibe a través de ella un espíritu cuyo verdadero y único nombre es libertad», asegura.
Aunque Chesterton se refiere a España en su escrito, Aparicio considera que hubiera sido «más justo y más apropiado» la referencia a León. «Los Decreta fueron denominados por el historiador Sánchez Albornoz ‘Carta Magna leonesa’, en alusión clara a la ‘Carta Magna inglesa’, pero para evitar cualquier sombra de sucursalismo preferí denominarlos ‘Cuna del Parlamentarismo’, subrayando así su carácter de inaugurales, lo que finalmente ha sido reconocido por la Unesco. Y mucho hemos ganado desde entonces, pues cuando utilicé esa locución por vez primera abundaban las muecas de incredulidad burlona, muecas que de algún modo han tomado forma en esa estatua reciente, la de la plaza de Santo Martino, que dice ser nuestro rey. Si alguna estatua merece Alfonso IX sería la de un rey legislador, la de un monarca adolescente leyendo en alta voz los Decreta que acaba de firmar. No son sus guerras, no son sus batallas, no son sus conquistas lo que hicieron de Alfonso un gran rey, fue su innovación legisladora, su reconocimiento del pueblo como protagonista político en igualdad de condiciones con la aristocracia y el clero», argumentó Aparicio.
Rogelio Blanco inició la lectura de los preceptos de Alfonso IX, en la que participaron miembros de la sociedad civil, de la educación y la cultura. Tras la entrega de los Premios Decreta 2023 a Cauce, Prieto y Molleda, el acto concluyó con la interpretación del ‘Himno a León’ por parte de los presentes.