El Bierzo es una comarca al Oeste de la provincia de León que tiene unas connotaciones especiales y que se encuentra rodeada de montañas desde la Sierra de Gistredo al Norte, las Sierras de Ancares, Courel, de la Encina y la Lastra al Oeste, los Montes Aquilianos al Sur y los montes de León al Sureste. Montañas como la Peña do Seo, el Catoute y la Guiana dominan el territorio, especialmente desde su centro en Ponferrada.
Toral de los Vados se encuentra al Suroeste del territorio y por allí discurre el cauce del Burbia que desciende desde los altos de los Ancares, el pico Cuiña y Mostallal, pasando por Villafranca para desembocar en el Cúa poco después de Toral.
Toral de los Vados en una ciudad desarrollada, a la vez nudo de comunicaciones con solera e industria, en el eje hacia Orense. Su situación ha posibilitado que desde la época romana hubiera una vía importante que unía Braga con Astorga. Con el desarrollo del ferrocarril su situación posibilitó un gran avance para la zona y en Toral lo reconocen con varios homenajes al tren incluso una fiesta dedicada el ferrocarril, además en la estación de Toral hay un homenaje a un personaje nacido en la localidad, Jan, el creador de Superlópez en un tren allí estacionado.
La cascada del Pelgo es una construcción de 1920 para dar energía a la central hidroeléctrica del Pelgo y se trata de una presa o azud de 15 metros de altura que llevaba el agua a los generadores de la central que está más abajo. El paso desde la parte de abajo a la de arriba de la cascada está prohibido.
Toral es un lugar donde se come bien y como la ruta no es demasiado larga se puede ir al Regueiro, un restaurante frente a la estación de tren, cuyo propietario es un apasionado de la geología y regala piedras de singulares recogidas en diferentes lugares de la geografía española con distintas cristalizaciones.
La ruta da comienzo en la localidad de Toral de los Vados, concretamente en las piscinas, donde hay un aparcamiento excelente que se llena con los calores del verano, pues a las piscinas se une la playa fluvial, otro elemento refrescante para días de calor. En las proximidades del aparcamiento, en dirección al río y desde allí se toma un sendero que va a la orilla del Burbia, pasa bajo los pilares de la autovía y continúa al lado de espacios donde apetece el baño, para seguir en zona sombría pasando por zonas de descanso y entrenamiento con aparatos para ello.
Al final se encuentra otro cartel con la ruta y se sube una ligera cuesta que desemboca en un camino asfaltado por el que puede pasar vehículos de motor y por ello se debe tener cuidado.
Sigue el recorrido por el asfalto que en fines de semana no suele tener tráfico, pero a diario pueden circular los camiones de la cantera por lo que se debe tener cuidado, en especial si se camina con niños, procurando circular por la izquierda.
Al llegar a la cantera el camino asfaltado entra en ella y está prohibido el acceso, por lo que se debe tomar un camino sin asfaltar que sale a la izquierda y va entre el río y la cantera, que se puede ver bien a la izquierda.
Pasada la cantera el caminos e convierte en senda al lado del río con zonas estrechas de subida en las que se debe prestar especial atención a los niños y llevarlos de la mano. Pasado este tramo el sendero entra en un soto de castaños y posteriormente se camina al lado del río y de la valla de la central hidroeléctrica del Pelgo que posibilitó la existencia del azud que es el salto del Pelgo. En un momento determinado se cruza una pasarela sobre el canal de desagüe de la central y a continuación se vadean dos arroyos fácilmente en época veraniega y se supone que con mayor dificultad en tiempo de lluvias. Cuando ya se oye el sonido de las aguas y poco después entre la espesara del bosque se aprecia la caída de agua de 15 metros de altura y 65 de longitud, una cascada de gran belleza y donde se puede tomar un baño si el calor lo aconseja, aunque para ello es conveniente llevar cangrejeras porque el suelo es irregular.
Tras la contemplación de la cascada solamente queda dar la vuelta por el mismo camino para llegar a la piscinas, finalizando así la ruta.