
CARTELERA EN LEÓN | 'Marte'. Manual práctico para sobrevivir en el planeta rojo
Ni que decir tiene que ‘Marte’ no se halla a la altura de ‘Alien’ o ‘Blade Runner’
17/10/2015
Actualizado a
18/09/2019

Viendo al bueno de Matt Damon plantar patatas en un improvisado invernadero construido en el suelo rojo de Marte en la película del mismo título del ‘todoterreno’ Ridley Scott me vino a la mente una lejana, muy lejana, película de principios de los años setenta titulada ‘Naves misteriosas’, donde Bruce Dern cuidaba con mimo en una estación espacial las últimas especies botánicas de la Tierra al ritmo de las pacifistas canciones de Joan Baez, una película extraña y de culto que supuso la primera incursión detrás de la cámara de Douglas Trumbull, más recordado por su enorme contribución a los efectos especiales en ese monumento cinematográfico llamado ‘2001, una odisea del espacio’, que el visionario Stanley Kubrick filmó durante varios años en la segunda mitad de la década de los sesenta. Ni que decir tiene que ‘Marte’ no está a la altura de ‘Alien’ o ‘Blade Runner’, dos magníficas aportaciones de Ridley Scott al género de anticipación hábilmente ‘contaminadas’ por el cine de terror y el cine negro, respectivamente. Su ‘Marte’ carece de la angustia que distinguió a la primera mostrando el lado más positivo y optimista del astronauta al que sus compañeros de expedición dan por muerto y abandonan en el planeta rojo, teniendo que a partir de entonces buscarse la vida cual Robinson Crusoe del espacio. El resto ya se lo pueden imaginar, los intentos de la Nasa para rescatar al ‘marciano’ en plan ‘Salvar al astronauta Watney’ con toda esa parafernalia propia de los americanos que a menudo me causa vergüenza ajena.


Lo más leído