Cantos al pasado cargados de futuro en el Mihacale

Se trata del último álbum de la artista madrileña, que reivindica el valor de la música tradicional en tiempos de auto-tune. En él recoge y sintetiza algunas de las fuerzas que vienen agitando el espectro cultural de nuestro país en los últimos tiempos, la tradición como punto de partida o de llegada.

Producido junto a Carlos Monfort (Sílvia Pérez Cruz) y para el que ha contado con cuatro acompañantes de excepción, tanto en la grabación como en los directos: Milena Grushkevych, viola; Violeta Veinte, violín; Helena Martínez, cello y Esther Muñoz, violín, 'Hilanderas' es la puesta de largo de esta joven artista que publicó en 2021 Temple, su primer EP coproducido junto a Diego Galaz (Fetén Fetén) y una colaboración, 'El son del camino', con Juanma Latorre (Vetusta Morla). En esta ocasión María de la Flor subirá al escenario acompañada de la cellista Helena Martínez.

Su música está intrínsecamente conectada con la tradición. Se desarrolla en un bucle atemporal donde nada empieza ni acaba. Precisamente en esta tradición es donde ella consigue hacer algo único y totalmente personal. María de la Flor canta al pasado con una voz cargada de futuro. Y es que las verdaderas tradiciones deshacen cualquier oposición entre lo antiguo y lo moderno.

María de la Flor es una de esas grandes voces que brotan de la escena, amante de la música tradicional en tiempos de Auto-Tune. La voz de De la Flor no se adultera con efectos digitales, es orgánica. Sus letras costumbristas, legado vivo que se nutre de “lo de aquí”, de lo nuestro; pues esta artista canta y compone desde la raíz.

María de la Flor nació en el madrileño barrio de Carabanchel, tiene genética maña y, además de su notorio interés por las músicas populares, no por ello conservadoras, también se nutre de la canción latinoamericana y no se cierra puertas en cuanto a investigar con sonidos más contemporáneos. Este viernes acude al Mihacale de Gordoncillo para su concierto a las 19:30 con acceso gratuito hasta completar aforo.