Con la incorporación de la JOL se ha visto cumplida una vieja aspiración de los maestros Aprea y Soriano en el sentido de que León pueda contar con una orquesta propia y que las múltiples enseñanzas que se recogen en el encuentro no caigan en saco roto sino que tengan un poso que contribuya a la formación musical del más de centenar de instrumentistas que conforman en la actualidad la joven formación que dirige el valenciano Francisco Valero Terribas.

De hecho, dos de las alumnas matriculadas en el curso se encargaron de dirigir a la JOL en los distintos movimientos del Concierto para piano y orquesta nº 3 de Beethoven en el primero de los ensayos con agrupación orquestal que tuvo lugar este miércoles en el Auditorio, siendo esta una de las composiciones que la Joven Orquesta Leonesa interpretará este sábado y el domingo a las 20:00 horas en los conciertos de clausura del encuentro, un programa que también incluye la obertura de la ópera ‘Medea’, de Luigi Cherubini, la también obertura de la ópera ‘El cazador furtivo’, de Carl María von Weber; el Concierto para piano y orquesta de Edward Grieg y el Concierto para piano y orquesta nº 1 de Peter Tchaikovsky.
Tal es el grado de compromiso del maestro italiano Bruno Aprea con el curso que se lleva celebrando desde hace trece años que se siente leonés y su estancia en esta ciudad se ha convertido en su mejor experiencia vital de estos últimos años.
De lo que se siente especialmente orgulloso es de haber hecho realidad su sueño de contar para esta cita anual con una joven orquesta integrada mayormente por instrumentistas leoneses. "Este es el sueño que tengo ahora para Italia. Recientemente he dirigido una Orquesta Sinfónica Nacional, equivalente a lo que en España sería la JONDE, y puedo asegurar que esta es mi máxima ambición", asegura Aprea, que reconoce en cada convocatoria la evolución que ha experimentado la JOL. "Cada año percibo un progreso notable en esta joven formación, no solo en el respeto por la música sino en la organización. Para España poder contar con formaciones como la JOL es una suerte".