Según recoge la Agencia Ical, las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas de Castilla y León han repuntado de manera ligera en el último año, cuando se contabilizaron 1.140 hechos delictivos frente a los 1.115 del año 2016, lo que supuso un aumento del dos por ciento. La provincia de Valladolid, con 336 casos, fue la que registró mayor número de delitos, seguida por León, con 169. También superaron el centenar de hechos delictivos en el último año las provincias de Zamora (121), Ávila (117), Salamanca (111) y Segovia (108), mientras que se situaron por debajo de esta cifra Burgos (96), Palencia (53) y Soria (29).
El crecimiento autonómico en el número de delitos fue la tendencia general en la comunidad, aunque se desmarcaron de ella las provincias de Valladolid, Ávila y Segovia. Fue precisamente la provincia abulense donde se registró la mayor caída, de un 18 por ciento, al pasar de los 143 a los 117 delitos; en Segovia descendió en un 7,69 por ciento, desde los 117 a los 108; y en Valladolid el descenso fue del 3,44 por ciento, desde los 348 delitos contabilizados en 2016 a los 336 hechos delictivos del año pasado.
Desde el año 2010, el número de delitos también ha crecido de manera general en Castilla y León, en especial en las provincias de León y Zamora, donde prácticamente se ha duplicado el número de delitos -de los 87 a los 169 en el caso de la provincia leonesa y de los 65 a los 121 en el caso de Zamora-, mientras que descendió en este periodo en Salamanca -de 133 delitos a 111- y en Valladolid -de 382 a 336-.
Estas cifras se encuentran lejos del pico de delincuencia detectado de manera especial en el año 2012, donde se tiene constancia del mayor número de delitos de los últimos años en explotaciones agrícolas y ganaderas de las provincias de Burgos (241), León (218), Segovia (174), Soria (78), Valladolid (519) y Zamora (248). Este máximo llegó en Palencia (76) un año antes, y en 2013 en los casos de Ávila (193) y Salamanca (297).
A nivel nacional, el número de delitos contabilizado el año pasado alcanzó los 13.660 frente a los 15.141 del año anterior, lo que supuso una caída del 9,78 por ciento, frente al 12,5 por ciento experimentado desde 2010. En España fue en el año 2013 cuando se alcanzó el máximo en el número de delitos, con 24.078.
37 robos al día
La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos alertó de que la información proporcionada es «muy incompleta» y que, si bien disminuyeron los robos en varias comunidades, a nivel global son más del doble de los que se han hecho públicos y aún se siguen produciendo 37 robos diarios en las explotaciones agrícolas y ganaderas. El colectivo advirtió de que los datos facilitados por el Gobierno no tendrían en cuenta los hurtos, unos delitos cometidos frecuentemente en el medio rural y que no han sido incluidos en esta ocasión, aunque si se contabilizaban en años anteriores.Unión de Uniones destacó la labor realizada por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Recordó además que el sector primario es «fundamental» para la generación de riqueza y empleo en el medio rural, y la reiteración de este tipo de delitos ocasiona pérdidas económicas, desincentiva la inversión en las explotaciones, además de generar miedo en el medio rural ante la sensación de impunidad con la que parecen obrar de los delincuentes autores de estos hechos. Por todo ello, la organización pidió más medios humanos y técnicos así como que se concentren los esfuerzos en controlar los puntos de entrega y venta de productos agrícolas y ganaderos para exigir la trazabilidad del producto, así como lugares específicos de venta de maquinaria y herramientas de segunda mano, y de cobre.