Javier R. de la Varga: "Es un texto escrito con alma y una gran belleza en la palabra"

‘Sweet Jane’, el último montaje de El Mayal, regresa por cuatro días al Teatro El Albéitar con un elenco femenino de uno de los talleres de la compañía residente de la ULE

Joaquín Revuelta
02/06/2021
 Actualizado a 02/06/2021
Una parte del elenco artístico de ‘Sweet Jane’ que esta semana regresa al Teatro El Albéitar. | JUAN LUIS GARCÍA
Una parte del elenco artístico de ‘Sweet Jane’ que esta semana regresa al Teatro El Albéitar. | JUAN LUIS GARCÍA
Tras el estreno absoluto que tuvo lugar el pasado 19 de abril en el marco del XXVII Festival de Teatro Universitario de Lugo y su posterior presentación en las muestras de las Universidades de Navarra, León (con dos representaciones) y Burgos, el último montaje de El Mayal, ‘Sweet Jane’, regresa al Teatro El Albéitar por cuatro días (miércoles, jueves, sábado y domingo) con pases a las 20:30 horas y a las 19:00 horas en el caso de la última función, y con entrada por invitación (dos por persona) que pueden adquirirse quince minutos antes del comienzo de la representación en la taquilla del teatro.  

Con dramaturgia de la vallisoletana Verónica Serrada y dirección de Javier R. de la Varga, ‘Sweet Jane’ es, en opinión de este último, «una obra absolutamente contemporánea, un texto escrito en 2020 con alma y una gran belleza en la palabra y transmisora de un mensaje necesario y urgente. Además, me daba la oportunidad de poder profundizar en el trabajo de interpretación que nos habíamos marcado para este elenco», señala el director de la compañía de teatro residente de la Universidad de León, quien explica el origen de este montaje en el hecho de que otro montaje anterior, «femenino en cuanto al elenco y feminista en el sentido de empoderar la figura de la mujer», se vio alterado por la situación sanitaria. «Me puse a buscar un texto para un grupo de chicas de uno de los talleres del curso pasado cuando nos tuvimos que quedar todos en casa durante unos meses y me encontré con esta revisión de la figura y el mito de Juana de Arco, en la que se han fijado autores como Bernard Shaw, William Shakespeare o Bertolt Brecht, entre otros muchos. Esta función pone en comparación determinados aspectos de la vida y los sucesos de Juana de Arco con otra serie de mujeres anónimas y algunas de ellas también con su nombre y apellido de otros momentos históricos y va haciendo una comparación entre sucesos, problemas con el poder, con la sociedad, con el individuo, con una misma que tuvo Juana de Arco y esta serie de mujeres», argumenta De la Varga, que se encontró con parte de este texto en una página de internet y rápidamente se puso en contacto con la autora, la vallisoletana Verónica Serrada, descubriendo para su sorpresa que tenían amigos comunes dentro de la profesión. «Un texto suyo ha estado en un montaje con varias piezas que ha tenido bastante difusión en las Naves del Español y que se llama ‘Prostitución’. Desde El Mayal me gusta trabajar no solo con autores contemporáneos sino vivos», destaca De la Varga, para quien otra característica del montaje que lo hacía especialmente idóneo para trabajar con la compañía, sobre todo en estos tiempos, es el hecho de tener una estructura muy fragmentaria. «Son escenas que se van sucediendo pero con presencias de una sola actriz, de dos en algún momento, salvo un par de momentos corales. Y eso normalmente es muy interesante para un grupo amateur donde cada una tiene sus horarios y yo monto digamos la consulta, quedo con una a una hora, con otra a otra... Eso me venía muy bien y en tiempos de pandemia más. Ellas se sentían más seguras, ensayando en una sala grande cada una de las actrices y yo y condensamos mucho el trabajo. Esto se hizo prácticamente en abril», reconoce el director de El Mayal. Misticismo individual y femeninoJavier R. de la Varga quiere dejar constancia de que en el montaje de ‘Sweet Jane’ Juana de Arco es un personaje de la función y no una figura metafórica. «La propia Verónica Serrada lo dice en el dossier de la obra: ‘Juana de Arco regresa del pasado porque piensa que su historia ha sido escrita por otros y ahora ella debe contarla’. Juana de Arco fue condenada por defender un misticismo individual y femenino. Ella tuvo que tener una inspiración para hacer lo que hizo. Esa inspiración la puedes poner en la fe, la puedes poner en una enajenación o la puedes localizar en el arte. Pero si esta inspiración lo hubiera delegado en el poder establecido, pues al poder no lo hubiera molestado. Le molestó que ella reclamaba que como ser humano individual podía tener una relación con Dios, pero como ser humano mujer», sostiene De la Varga, para quien no se trata del personaje medieval por todos conocido sino que el personaje que aparece en la función lo hace con su vivencia hasta el día en que muere pero también con la vivencia de su mito a lo largo de estos años. El director del montaje destaca el rico verbo de Verónica Serrada que lo hace en ocasiones difícil para sus intérpretes pero al mismo tiempo altamente motivador, lo que considera importante.   Para Javier R. de la Varga trabajar con un colectivo de actrices de diferentes edades es muy enriquecedor. «Un grupo cuanto más heterogéneo en edades, en timbres, en físicos, mucho más interesante y más rico es. El Mayal es una actividad que fundamentalmente está dirigida a miembros de la comunidad universitaria pero que no está cerrada al resto de la sociedad. En este elenco hay varias que son universitarias, varias que terminaron hace cuatro o cinco años y la persona de más edad este año no es universitaria pero el curso anterior sí que lo era. Pero en cuanto al trabajo es fantástico, pues cuanta más diferencia haya mejor. Esto ya lo decía el maestro Urdiales, es bonito cuando se va a un teatro y se ve gente fea, y no esa tendencia del cine y la televisión a la guapura», argumenta De la Varga, que a partir de este miércoles y durante cuatro días regresa con un montaje que lo pudo ver poca gente por la restricción del aforo al 30% que marcaba la normativa sanitaria en el momento de su estreno en el Teatro El Albéitar. «Cuando representamos la obra en León había una reducción del aforo del 70% y en El Albéitar solo podían entrar 70 personas por sesión, por lo que se quedó mucha gente fuera. Luego había programación prevista por parte de Pepe Tabernero y del director del Área de Actividades Culturales, César Ordóñez. El propio Tabernero nos propuso estas cuatro fechas cuando todavía estaba vigente la restricción del 70% y ahora por suerte ya está al 50%. Aún así no podemos meter más de 105 espectadores. La propuesta pretendía cerrar también la temporada escénica en El Albéitar. Ahora solo cabe esperar que no suceda que venga todo el mundo el fin de semana y las representaciones previstas para el miércoles y el jueves se queden vacías. A la gente que conocemos y que sabemos que van a venir les empujamos un poco a que lo hagan entre semana», señala el director de El Mayal, que también quiere aclarar que las actrices participantes en ‘Sweet Jane’ pertenecen a uno de los tres talleres operativos y que engloban a un total de treinta personas, algunas de las cuales participaron en el anterior montaje de ‘Medea’. «De hecho ya estamos planeando de cara al siguiente curso y con esto lo que te quiero decir es que Teatro El Mayal no son solo estas siete actrices, aunque el protagonismo recaiga ahora en ellas», concluye.
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