La Reina Letizia, sus compras en su visita a la Cuesta de Moyano

La monarca ha visitado la Feria de Libros permanente de Madrid que cumple 100 años

Europa Press
09/05/2025
 Actualizado a 09/05/2025
La Reina Letizia | EUROPA PRESS
La Reina Letizia | EUROPA PRESS

La Reina Letizia ha retomado su agenda oficial tras su emocionante y comentadísimo encuentro con la Princesa Leonor el pasado sábado en Panamá durante una escala del crucero de instrucción de La Armada Juan Sebastián Elcano. Feliz tras haber podido pasar varios días con su hija, y derrochando estilo con un juvenil look protagonizado por su trench viral de cuadros vichy en color blanco y negro, la monarca ha visitado la Feria de Libros permanente de Madrid de la Cuesta de Moyano -situada a pocos metros del Museo del Prado, la Estación de Atocha o el parque del Retiro- que este 11 de mayo celebrará su centenario.

Acompañada por diferentes autoridades entre las que se encontraban el Ministro de Cultura, Ernesto Urtasun, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, o la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, con la que ha derrochado confidencias y complicidad, la Reina ha recorrido los diferentes puestos, charlando con los libreros e interesándose por diferentes ejemplares. Apasionada de la lectura -es una lectora ávida que disfruta leyendo todo tipo de géneros literarios- Doña Letizia no ha dejado pasar la ocasión de adquirir varios libros como recuerdo de esta visita tan especial cuando se cumplen 100 años del nacimiento de la popularmente conocida como 'Feria de la Cuesta de Moyano', todo un emblema culturario de la capital.

Europa Press ha sido testigo de que la madre de la Princesa de Asturias ha escogido estos títulos: 'Monstruos y lógica', del autor Gilbert Keith Chesterton; 'Fábulas fantásticas' de Ambrosse Bierce; 'Cartas de un poeta (1826-1849), de Edgar Allan Poe; y 'El vendedor de libros viejos', de Stefan Zweig. Ejemplares para la biblioteca que posee en el Palacio de La Zarzuela y que se ha encargado de pagar personalmente a los libreros después de que un miembro de su equipo de trabajo -una mujer vestida con uniforme militar que no se ha separado de ella durante toda la visita- le diese discretamente dinero en efectivo.

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