LNC Cofrade: Un beso

La veneración a las imágenes de nuestra Semana Santa, una historia en auge

Carlos García Rioja
03/05/2025
 Actualizado a 03/05/2025
La veneración al Medinaceli es la más antigua de cuantas se celebran. | XUASÚS GONZÁLEZ
La veneración al Medinaceli es la más antigua de cuantas se celebran. | XUASÚS GONZÁLEZ

Con un siglo de presencia en la historia cofrade española, el besamanos alcanzó muy pronto nuestra ciudad, donde el primero se celebró el Jueves de Pasión de 1939, organizado por Minerva y Vera Cruz en torno a la Piedad («Besamanos en San Martín», LNC Cofrade n.º 104, 22.03.2025). Como colofón de la novena de los Dolores, se continuó celebrando hasta 1967, si bien en 1952 la imagen de la Soledad pasa a ser su protagonista en un tiempo en el que entra en escena el primer besapiés en León.

Continuando con la tradición de dedicarle al Nazareno –entonces al Dainos– una misa el primer viernes de marzo, el estreno de Jesús de Medinaceli en 1949 trajo consigo su veneración en la mencionada fecha, la cual se constituye en decana de cuantas se siguen celebrando en la actualidad, hoy como cierre del triduo que se celebra en su honor, novena en décadas pasadas. Fue, además, el primero que en los inicios de la crisis sanitaria de 2020 recomendó sustituir el beso por una reverencia, la cual en muchos casos se ha mantenido tras la vuelta a la normalidad de besapiés y besamanos en 2023, cuando muchos ya pensábamos que no se retomarían tal y como los conocíamos hasta antes de la pandemia.

En el seno de las cofradías leonesas, este íntimo acercamiento a las imágenes ha crecido exponencialmente en la última década, si bien es a partir de 1990 cuando comienza a ganar presencia entre sus actos. La estación del Via Crucis de las Siete Palabras en el templo conventual de las Carbajalas conllevaba entonces un besapié al Cristo de los Balderas a cargo de la comunidad benedictina, siendo también el germen para que en 1997 la Redención instaurase el que –ya abierto a los fieles– se celebra en ese mismo lugar cada Sábado de Pasión.

Sin embargo, es el organizado por la Cofradía de Jesús a su titular el segundo sábado de Cuaresma desde 2003 el que, a la postre, sirve de aldabonazo para cuantos se han incorporado a renglón seguido, y no solo en fechas previas a la Semana Santa: desde 2007, Jesús Sacramentado expone en besamanos a su Virgen de la Esperanza en torno al 18 de diciembre. De hecho, en la actualidad son más de una veintena las veneraciones que tienen lugar a lo largo del año de la mano de trece de las penitenciales leonesas. Una creciente nómina a la que hoy se suma el Gran Poder con el besamanos a su homónima imagen mariana.

Lo más leído