
Siguen avanzando los meses y siguen apareciendo en el mercado las propuestas de los últimos ‘
triunfitos’ con éxito, los de la primera edición tras un necesario parón de años. La última en publicar su disco ha sido
Ana Guerra, aunque lo cierto es que tampoco hacía falta que lo hiciera. Y me explico. ‘Reflexión’ solo incluye tres canciones que no hubieran visto ya la luz en un trabajo de menos de media hora de duración. Si a eso le incluyes que dos canciones parecen entrar con calzador para rellenar (una versión acústica de ‘Ni la hora’, su canción con
Juan Magán y un remix de ‘
Lo Malo’, el tema que debio representar a España en
Eurovisión el año pasado) no se entiende mucho qué quiere presentar este disco más allá de vender un objeto a sus fans. Porque renegaba Ana Guerra de hacer lo que ella considera
reguetón (¿acaso ‘Lo Malo’ lo es?) y lo cierto es que todo lo que se aleja de ello en el disco es perfectamente olvidable. Ha tomado parte activa la canaria en la composición del disco, no como en el caso de una Aitana que pasaba por allí como ya dijimos en esta
sección, pero desde luego que no ha recibido los mejores consejos. Se queda ‘
Reflexión’ en un saco de ideas sin demasiado sentido que no permiten aún saber qué es lo que quiere ser esta chica en su carrera. Tiempo para darle la vuelta tiene, aunque habrá que ver si consigue despegarse de la imagen que vende en su debut.