Deprisa y lento a la vez

La última de La Nueva Crónica

Por Fulgencio Fernández y Mauricio Peña
01/10/2024
 Actualizado a 01/10/2024
| MAURICIO PEÑA
| MAURICIO PEÑA

Por suerte, vamos más deprisa de lo que creemos y por desgracia  más despacio de lo que necesitamos. Parece extraña, incluso un contrasentido, una cosa y la otra en la misma frase pero, ya lo sabes, «cosas veredes amigo Sancho», repetimos con aire de sabiduría cervantina y dicen los expertos que tal frase no aparece en el Quijote.

Es decir, de lo que parece a lo que es puede haber un trecho.

Se puede ir deprisa y lento pues, seguramente, venimos de excesivamente lejos y tal vez por ello tardamos en llegar.

Y es que no hace tanto que la escasa literatura existente de este deporte de los aluches, tan nuestro como los carros engalanados y los pendones, hablaba de «bellas señoritas» entre el público, de algunas hermanas de luchadores que demostraban  «alma masculina»o «más hombría que muchos machos». Era todo lo que se decía de ellas, cuando no comentarios que hoy sonrojarían.

Y cuando irrumpieron en la hierba, hace nada y menos, tuvieron que soportar lo de fregar y esas gracias que no la tenían, ni la más mínima, pero como se las reían.

La igualdad en muchos aspectos, el económico por ejemplo, les llegó por ley. Parecía el gran salto, el definitivo, pero algo pasa que no tanto... Tal vez más despacio de lo que creemos.

Archivado en
Lo más leído