Estructura de pueblo; integradas en la ciudad

Armunia, Trobajo del Cerecedo y Oteruelo son las tres pedanías que pertenecen al Consistorio leonés. Zonas más bien residenciales y con variedad de servicios

Rosa Álvarez
10/12/2017
 Actualizado a 19/09/2019
Armunia fue hasta 1968 Ayuntamiento en sí misma, pasando a integrarse después como pedanía en el de León. | DANIEL MARTÍN
Armunia fue hasta 1968 Ayuntamiento en sí misma, pasando a integrarse después como pedanía en el de León. | DANIEL MARTÍN
Por su estructura administrativa están, por así decirlo, un paso por delante de los barrios. Armunia, Trobajo del Cerecedo y Oteruelo son las tres pedanías que pertenecen al Ayuntamiento de León. «Tienen la estructura que podría tener un pueblo, pero están integradas en la ciudad», resume José María López Benito, el concejal de Infraestructuras y Deportes que tiene asignadas, además, estas zonas dentro de sus funciones. Como en el caso de los barrios, en ellas se han creado varias asociaciones de vecinos con el fin de reivindicar que se lleven a cabo acciones que impliquen su mejoría, su impulso, pero disponen también de una figura con un carácter más «oficial» y de la que carecen los barrios. Se trata de las juntas vecinales, que cuentan con sus respectivos presidentes, o alcaldes pedáneos, que son elegidos mediante votación por parte de los vecinos y que trabajan en «estrecha colaboración con el Ayuntamiento, con el que mantienen una buena sintonía», apunta López Benito.

Las juntas vecinales son subvencionadas de forma directa por parte del Consistorio, que en junio de este año renovó sus convenios de colaboración para la prestación de servicios básicos con la de Oteruelo, a la que aportó 55.000 euros, y con la de Trobajo, que subvencionó con 88.000. Por su parte, a Armunia corresponderían unos 30.000 euros. Unas cantidades en las que no se incluyen «múltiples actuaciones u obras que se llevan a cabo cada año en los tres territorios de común acuerdo con los presidentes o alcaldes pedáneos», advierte López Benito.

Las pedanías avanzan ahora directamente de la mano del Consistorio leonés, pero esto no siempre fue así. Armunia, por ejemplo, fue Ayuntamiento en sí misma, tuvo independencia de la capital hasta que en 1968 fue absorbida y convertida en entidad local menor. Trobajo del Cerecedo, hasta esa misma fecha de hace ya cinco décadas pertenecía también al Consistorio de Armunia y pasó después al de León. Además, de forma previa, en el siglo XIX, formó parte del Ayuntamiento de Santovenia de la Valdoncina, habiendo pasado, por tanto, por tres Consistorios hasta la fecha.

Por volumen de vecinos cabe detenerse en primer lugar en Armunia, con un censo que ronda los 5.000 habitantes, si bien el presidente de su junta vecinal, Luis Ángel Alonso Fernández, cifra el número real de habitantes en prácticamente el doble. Para él, desde que Armunia pasó a integrarse como pedanía de León, la evolución ha sido «lenta» y, aunque reconoce que «se han hecho muchas cosas buenas», es necesario seguir trabajando para que esta no sea una zona «dejada». Lo que cabría reforzar, en su opinión, son aspectos básicos como el cuidado y la limpieza diaria o el estado de las infraestructuras, tales como aceras, jardines o alumbrado o la seguridad ciudadana. «El Ayuntamiento intenta ayudarnos en lo que puede, pero a veces es difícil llegar a todo», subraya. En esta pedanía, comenta, hay unas 540 viviendas sociales y un volumen de negocios que no deja de caer y que confía en que pueda llegar a revitalizarse en algún momento. De los servicios, destaca el número de centros educativos, en los que estima que están matriculados unos 3.00 alumnos, el centro de salud, el puesto principal de la Guardia Civil o la sede de la Asociación de Autismo León, ubicada en el edificio C.I.A. (Centro Integral de Atención Ciudadana).

López Benito apunta respecto a Armunia que el Consistorio tiene pendiente una actuación «muy importante y muy reivindicada por los vecinos», como es el caso de adecentamiento del espacio que ocupaba Soto. «El Ayuntamiento ha iniciado un procedimiento para que la parcela esté completamente limpia después de que las antiguas instalaciones hayan quedado hechas añicos y hayan sido objeto de continuos robos de chatarra», comenta. A esta actuación se destinará una considerable inversión, que afirma que ronda los 250.000 euros.

Demandas del día a día

A Armunia le sigue en número de vecinos Trobajo del Cerecedo, con casi un millar. El presidente de su junta vecinal, Federico Hidalgo, considera que su mayor carencia se encuentra en detalles como la limpieza o el equipamiento de parques, en los que han sufrido robos. En seguridad ciudadana señala que están «bastante bien» puesto que cuentan con «policía de barrio» y como puntos fuertes, asegura que funcionan bastante bien en cuanto a actividades culturales, ya que ofertan una gran variedad. También destaca la existencia de zonas verdes y buenas instalaciones deportivas. Aún así, reconoce que «Trobajo es un pueblo pequeño, en el que no se ha construido vivienda nueva, por lo que el tema urbanístico está mal, parado» y sus vecinos se tienen que ir fuera ya no solo porque no haya trabajo, que también, sino porque su margen de crecimiento es pequeño. Por lo demás, considera que siempre hay margen de mejora en muchos aspectos, en los que se muestra dispuesto a seguir trabajando y pide ayuda al Ayuntamiento para ello.

Por su parte, Oteruelo cuenta con apenas 300 vecinos, lo que no supone una merma en los servicios que les ofrece. Hay por ejemplo –según la web del Ayuntamiento– una casa de cultura, una biblioteca, un consultorio, policía de barrio, un salón de actos, un centro social y de ocio en las antiguas escuelas, un polideportivo o un parque infantil. El presidente de su junta vecinal desde el año 1999, Bernardo Sánchez Prieto, valora el avance de la pedanía también como «lento». Destaca, no obstante, la buena colaboración del Equipo de Gobierno para que se puedan hacer pequeñas obras que mejoren su aspecto y sus servicios. Como ejemplo, apunta que la zona de debajo del mirador se lleva acondicionando en los últimos años y pide que se siga trabajando en las zonas ajardinadas, infraestructuras o la mejora del asfaltado. «Faltan cosas por hacer, pero algunas se van haciendo», comenta. Para él, el «objetivo principal» y el más ambicioso, es que se cree empleo en Oteruelo y se asiente población. «No lo he logrado porque hay un freno en el plan general de ordenación urbana que ha paralizado toda la ampliación que pudiera haber perimetralmente en Oteruelo», dice, y advierte también que seguirá pidiendo una carretera que conecte directamente a la ronda sur y al parque tecnológico, para evitar el paso de camiones por la Avenida de Portugal. Para esto asegura que se ha «sentado en Madrid», pero para el resto «pelea en León», donde agradece la predisposición que muestra el Consistorio.

Respecto al futuro de esta pedanía y al de las otras dos responde López Benito. «Son zonas residenciales, en las que destacan más los servicios que los negocios, por lo que creo que se mantendrán más o menos como hasta ahora», subraya.
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