Con música de flamenco y rodeados de banderas del Pueblo Gitano, la etnia de origen romaní ha organizado junto a la corporación municipal un acto institucional frente al mural dedicado a su pueblo en el Paseo del Río Bernesga. "Es un día de alegría y reconocimiento pero también de reivindicación", ha añadido María Hernández, animando a su etnia "a pensar en el futuro", en un día que conmemora el primer congreso mundial romaní celebrado en Londres en 1981.
Aquel congreso estableció la bandera del pueblo gitano, que es "azul como símbolo del cielo y la libertad, verde como el campo aludiendo a nuestro pasado errante y la rueda de la bandera de la India", de un pueblo que no olvida sus orígenes. También en Londres, la etnia gitana determinó el que sería su himno mundial desde entonces, 'Gelem-Gelem', que en romaní significa 'Anduve, anduve', himno que ante la emoción de los presentes, ha cerrado el acto institucional.
Por su parte, el alcalde de León, José Antonio Diez, les ha pedido "trabajar juntos para un León mucho mejor" y ha reconocido a su vez "el avance del pueblo gitano en la sociedad leonesa integrándose en numerosas actividades", lo que provocó los aplausos de los presentes en el acto.
Convivencia y justicia
No ha faltado en el acto Jesús Hernández, conocido como el tío Jesús, y actual coordinador del Consejo de Ancianos de la etnia gitana de León. "Tenemos que tender puentes para una sociedad más justa", ha defendido, porque "estamos obligados a convivir". "Nosotros tenemos el privilegio de ser españoles y de ser gitanos", ha defendido orgulloso y emocionado. Su principal reclamación es cortar de raíz el creciente antigitanismo en diversos sectores de la población y ha puesto como argumento los hechos acontecidos el pasado verano en Jaén y Granada, uno de los momentos de mayor tensión de los últimos años entre gitanos y payos.
"No somos un pueblo dócil cuando pisan nuestros derechos", ha afirmado María Hernández, y por esa razón ha animado a los gitanos a trabajar juntos para conseguir avances. También ha pedido el fin del "aislamiento en los márgenes de la ciudad".
Estatuto cultural y presencia política
Ante la mirada de Camarón desde su mural, los gitanos de León han defendido su aportación a la cultura española y Jesús Hernández ha resucitado una reivindicación histórica: "en el tren de la Constitución de 1978, los gitanos nos quedamos atrasados mientras todas las nacionalidades tuvieron sus retribuciones, los gitanos tenemos que tener voz en la política" y ha solicitado además, un estatuto cultural, que les reconozca y ampare en la Constitución Española.