El café, a 1,70 euros: "No podemos hacer nada, sino no mantenemos un negocio"

Después de ser uno de los sectores más afectados por las restricciones de la pandemia, la hostelería leonesa se queja ahora de la subida en la factura energética que está comprometiendo la viabilidad de muchos de sus negocios. En este sentido, este martes por la tarde los bares y restaurantes del centro de León realizarán un simbólico apagón de cinco minutos para visibilizar su malestar.

Los hosteleros aseguran que la factura de la luz se ha llegado a duplicar en los últimos meses, en "un hachazo bastante gordo". Por ello, locales "emblemáticos" de León "ya están cerrando porque no se puede mantener". "No es normal lo que estamos pagando", comenta el propietario de un restaurante de la Calle Ancha.

No obstante, el cliente también comparte la preocupación por el alza en el precio de la luz. Un incremento que estaría obligando a subir los costes en la hostelería y que tampoco ayuda al consumo. "Ahora mismo acaba de marchar uno diciéndome que me ha pagado la luz con un café a 1,70. Nosotros no podemos hacer nada, tenemos que poner esos precios porque sino no mantenemos un negocio", señala un hostelero de la capital leonesa.

Tanto por el cliente como por la rentabilidad de los negocios, en el sector no piden tanto ayudas directas, como ocurrió cuando el Covid no permitía abrir los locales, y reclaman una menor presión fiscal. En este sentido, consideran que las subidas de impuestos no ayudan a salir de la crisis. "No es tanto las ayudas, es más que aprendan a administrar situaciones de crisis que son momentos en los que creo que hay que bajar los impuestos. Cuando vayan bien las cosas es cuando puedes subirlos, en teoría, y es cuando la gente se lo puede permitir porque pueden acompañar los salarios y el poder de adquisición para recaudar con impuestos. En momentos como estos, seguimos subiendo todo y ahogamos a la gente y vuelta al 2007", valora un empleado de un local de la Plaza Mayor.

Por su parte, los camareros leoneses también se quejan de las condiciones de trabajo y consideran que los empresarios del sector deberían mejorar los salarios para evitar las carencias de personal. "No nos valoran como profesionales y el salario no da para nada", indica una camarera de la zona de la Catedral.

Esta tarde, las terrazas de la Plaza Mayor encenderán velas para visibilizar esta preocupación del sector por el alza de la electricidad. Un apagón temporal, de cinco minutos, con el que exigen soluciones para que no se convierta en definitivo.