
Sin embargo «la afluencia de peregrinos, los residuos en forma de recuerdos que estos dejan, han vuelto a proliferar», explican en un comunicado en el que quieren llamar la atención sobre esta situación.
Las asociacionespretenden concienciar de «que el Camino es un monumento en un entorno natural, que hay que respetar en todos los sentidos, y el medioambiental es uno de ellos». En este sentido, quieren hacer una crítica sobre «la moda de dejar cualquier objeto a modo de recuerdo» de su paso por esta ruta Patrimonio de la Humanidad.
Recuerdan también que sí existía la antigua tradición de depositar una piedra en la Cruz de Ferro, o en otros lugares representativos del Camino una piedra. Pero actualmente muchos peregrinos «dejan artículos de todo tipo, casi todos contaminantes del medio ambiente», por eso «apelamos a la responsabilidad con la naturaleza por parte de los peregrinos, para que cada vez sean menos las ocasiones en las que tengamos que desplazarnos a limpiar el entorno de la Cruz de Ferro».
Si bien también respetan el motivo por el que una persona quiera dejar un recuerdo en alguno de los puntos del Camino, explican que es importante «seguir concienciando, para mantener el Camino en las mejores condiciones posibles de limpieza».