El concejal de Infraestructuras, Roberto Mendo, anunció que las piscinas del Toralín tienen un deterioro muy importante "que va a impedir su apertura en la fecha prevista", dijo. Considera que es una mala noticia para los usuarios, aunque ya se había delantado tras la primera visita que se hizo a las instalaciones. En esa visita "se apreciaban unas deficiencias bastantes serias". Asegura que lo más preocupante es lo no visible.
Recuerda que antes del pleno de organización se pusieron a trabajar con el área de Deportes para comenzar a tomar medidas. Los forjados estaban mal, así como los sótanos y decidió solicitar un informe de los técnicos, en el que se señalaban tres deficiencias importentes, una a nivel estructural, corrosión en las armdauras, fisuras en el hormig´y su degradación y desprendimiento. Había un estado de la cubierta muy malo y un estado de ventilación muy defectuoso, que no eliminaba la humedad en el ambiente y la corrosión era mayor. El informe concluyó que era necesario un estudio de la instalación para ver si podría abrirse para su uso. A partir de ahí, una empresa especializada en estructuras de hormigón realizó ensayos en la instalación y, a raíz de los mismos, se emitió un informe que dice que aprecia una filtración de agua de los vestuarios y duchas. Ya era constatable en los sótanos, apunta. "Hay deficiente estanqueidad y el hormigón se ve dañado hasta el punto de que pierde sus cualidades".
Los vasos de las piscinas están deteriorados, los pilares y muros también, hay oxidación del hormigón y de armaduras, aunque la piscina podría llenarse "pero el problema grande está en el forjado y por la zona por donde anda la gente". En muchos casos, la corrosión es total, apunta. "Es una patología catalogada como muy grave y hay peligro de colapso", asegura.
Requiere tres actuaciones, renovar el forjado del suelo de la planta baja, la reparación de vigas, pilares y vasos de la pisicna y la inmpermeabilización de los vasos. Las dos primeras se acometerán de urgencia, porque comprometen el edificio, aclara Mendo. Las reparaciones requieren 290.000 euros para la primera actuación, 100.000 para la segunda y 150.000 para la tercera. El concejal de Hacienda ha recogido la necesidad para iniciar este expediente con la máxima urgencia para las dos primeras. Se necesita una modificación de crédito que irá a pleno en septiembre, y se podría ser contratado, por vía de urgencia. "Dificilmente antes de las navidades se podría trabajar", lamenta Mendo. El plazo de ejecución lo dirán los técnicos pero, en presupuestos de 2024 se acogerá la tercera pata.
Considera Mendo que la reparación hará que "la temporada esté perdida", mientras se realizan las obras. En el lado positivo, espera que se reorganice la instalación de las piscinas cubiertas de la parte alta para que den servicio a los usuarios y lamenta la dejadez del anterior equipo de Gobierno para no hacerlo.
Mendo se pregunta si conocían este problema "y si lo sabían, si miró a otro lado". Aunque desea pensar que no fue así, considera que "ha habido un ejercicio de irresponsabilidad" porque lo habrían visto de visitar las instalaciones. Augura que echarán balones fuera pero, es necesario acometer la reparación y asegura que ya han comenzado a tomar decisiones, pero cerrando las piscinas para solucionar "el problema estructural y el que lo originó".
La concejala de Deportes, Eva González, apunta que solo se cerrará la zona de piscinas, el resto permanecerá abierto. En cuanto a las piscinas de la zona alta, abrirán de 7:30 a 22:00 horas, pero de 18:00 a 20:00 horas estará cerrada al público para destinar sus ocho calles a los cuatro clubs que existen. Se realizarán todos los cursillos previstos menos el de los más pequeños y la matronatación, que se realizaban en la piscina pequeña.
Las instalaciones de las piscinas cerradas estarán disponibles a partir del 12 de septiembre de 9:30 a 22:00 horas.