Los trabajadores del servicio de limpieza y recogida de residuos de Ponferrada celebraron un año más el día de su patrón, San Martín de Porres, con reproches hacia la empresa adjudicataria, FCC, por no haber aplicado todavía la subida salarial del 1% reconocida por los tribunales.
El comité de empresa, liderado por CGT, recordó que, tras dos sentencias favorables del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJ) que les reconocen el derecho a ese incremento, la empresa ha presentado recurso de casación ante el Tribunal Supremo, lo que consideran una maniobra para “alargar la angustia” que los trabajadores sufren desde hace tres años.
“Aunque FCC sabe que su recurso no prosperará, prefiere seguir reteniendo el dinero de nuestras familias como castigo a quienes no somos sumisos a sus imposiciones”, denunciaron desde el comité. Aun así, confían en obtener una nueva sentencia favorable, aunque reprochan al Ayuntamiento de Ponferrada que no tenga en cuenta las resoluciones judiciales previas “para resolver el contrato con esta adjudicataria”.
Desde CGT advierten que el Ayuntamiento es el único que puede desbloquear esta situación, exigiendo el cumplimiento del contrato y elaborando un nuevo pliego que garantice un servicio público de calidad. “Esperamos que esta vez los responsables tengan en cuenta las aportaciones de la plantilla, para que Ponferrada tenga el servicio de limpieza que se merece”, subrayan.
Entre las demandas del comité, destaca la reunificación de los servicios de limpieza y recogida, ya que “la división del servicio y las subcontratas solo han traído más jefecillos, más locales y, en definitiva, un mayor coste y peor organización”.
También denuncian las desigualdades salariales dentro de la plantilla: “Es inaceptable que haya personas haciendo el mismo trabajo y cobrando en algunos casos la mitad; es vital unificar las condiciones laborales”, reclaman.
Por último, CGT volvió a denunciar el trato desigual y la persecución sindical hacia sus afiliados en Ponferrada. “FCC carga contra quienes hacen valer sus derechos, relegándolos a los peores trabajos y en las peores condiciones”, concluyen.