Un informe jurídico solicitado por la Junta, no recomienza que la Fundación Las Médulas se haga cargo del Aula Arqueológica, gestionada por el Instituto de Estudios Bercianos, como este ha pedido, tras acumular unas deudas que suman 129.000 euros, a fecha de 2022, asegura su presidenta, Patricia Bruzos y no poder hacer frente a las nóminas de sus empleados desde hace seis meses. Esa cifra es la que podría no permitir la subrogación de los dos empleados que hasta ahora trabajaban en el aula, una decisión que se tomará después de que el IEB entregue su deuda actualizada al Patronato de la Fundación este lunes próximo.
Es la esperanza que mantiene Bruzos ante esa cifra que podría lastrar el traspaso del Aula y que el IEB considera que la Junta debe asumir, explica Bruzos. De no hacerlo, dejaría al IEB en una situación delicada “no va a desaparecer, porque es una ONG apolítica y así debe seguir”, con sus proyectos culturales en Las Médulas, pero tampoco encuentra crédito para continuar, por lo que le quedaría pedir a los ayuntamientos bercianos aportaciones que puedan hacerlo salir de una deuda heredada de hace más de 12 años. La Fundación ha pedido esas cuentas y se compromete a convocar de urgencia el Patronato de nuevo, Bruzos espera que sea ya en agosto, para tomar una determinación.
Bruzos recuerda a la Junta sus obligaciones con este Patrimonio de la Humanidad y espera solucionar la situación.
Un problema antiguo
Recuerda que la relación del IEB con la Junta y el Aula empieza en el 98. Entonces se firma un convenio con la Consejería de Cultura que tenía competencias en el paraje. En base a él, la Junta aportaba el edificio y el IEB lo gestionaba y se hacía cargo de los gastos. En 1998 se contrata personal y en 2004 se produce la última firma de convenio que recoge que para prorrogarlo tiene que hacerse una adenda al convenio “que no se hizo”. Así, el IEB sigue gestionado el aula pero no hay nada que le una formalmente a la Junta.
Desde hace 12 años, la deuda que ha generado el Aula es de 129.000 euros hasta 2022 "se ha seguido con ella por amor a las Médulas y por una gestión eficaz", dice su presidenta. Cuando la nueva Junta directiva cogió el mando, en 2020 se encontró con un ERTE, por la pandemia y con la deuda del Aula "nuestro objetivo fue conseguir que los empleados tuvieran una garantía de continuidad" bien con el IEB o con otra institución.
En 2021 se comienza una negociación que acaba con un protocolo para llegar a una gestión unificada en Las Médulas. Se abría la puerta a que fuera el Consejo Comarcal el que se hiciera cargo de esa gestión. Pero, tras las elecciones, sigue adelante ese propósito de gestión, aunque se establece que sea la Fundación Las Médulas la que se haga cargo de la gestión cultural y turística de Las Médulas.
"Las Médulas requieren una gestión única y la implicación de todos", justifica el IEB asegurando que estaba conforme con ese supuesto. Se esperaba que, antes de abril, se consolidada esa cesión "eso nos hizo esperar", porque “no había deuda con los trabajadores y esperábamos que la Fundación se subrogara en sus contratos”. "Hemos velado por los trabajadores, no por la economía del IEB", reconoce Bruzos.
La insuficiencia de crédito fue "hundiéndonos en la desesperación" porque se le negaban las ayudas por ella. Así, reconoce que aceleraron los contactos con Patrimonio y Fundación, para formalizar la cesión de trabajadores "no existía un informe jurídico que la Fundación debía solicitar para hacerla". Hace 15 días ya se presentó ese documento pero se nos expuso que la cesión no podría hacerse con deudas. La situación del IEB "se hace insostenible" porque la cesión iba a producirse en este mes de agosto "la opción que nos quedaba era cerrar el aula y hacer entrega de la misma, lo que se hizo el 2 de agosto a la Junta".
El IEB ha remitido un informe al presidente de la Junta recordándole la relación del IEB con las Médulas "porque fuera de nuestras fronteras no aparece por ningún lado". En él se recuerdan las obligaciones de la Junta con este paraje. “Confío en que la Junta entienda que es lo mejor". Sí considera Bruzos que debe costear la deuda acumulada.
Con respecto a la opción planteada por algunos grupos políticos de que sea el Consejo el que lo gestione, Bruzos considera que no es el paso, porque el plan estratégico de gestión no lo permitiría ya que también el ente comarcal debería ceder su centro de recepción de visitantes a la Fundación.