Comienza la vendimia en el Palacio de Canedo

La recogida se ha adelantado este año por las altas temperaturas de la primavera y el verano

L. N. C.
21/08/2015
 Actualizado a 17/09/2019
José Luis Prada a Tope prueba las uvas de los viñedos a los pies del Palacio de Canedo. | C. Sánchez (Ical)
José Luis Prada a Tope prueba las uvas de los viñedos a los pies del Palacio de Canedo. | C. Sánchez (Ical)
Con las primeras luces de este viernes ha comenzado la vendimia en el Palacio de Canedo. Será once días antes que en 2014, cuando se cortaron las primeras uvas el primero de septiembre. La meteorología de este año, con una primavera y un verano cálidos, adelantó la brotación, la floración y el envero, de ahí el adelanto.

Las lluvias de los últimos días aportaron el agua necesaria para fortalecer la maduración, de modo que la previsión de cantidad es un poco mayorque el año pasado, y la calidad puede ser una de las mejores de los últimos años, según señala el enólogo del Palacio de Canedo, José Manuel Ferreira, que destaca el "excelente estado sanitario".

Las primeras uvas en entrar en bodega serán las de la variedad chardonnay que se cultivan a los pies del Palacio. Esta variedad francesa es un poco más temprana que el godello, la otra con la que hace pareja en el espumoso de Prada a Tope, el Xamprada blanco.

 Se vendimiará solo de mañana, entre las 8 y las 12 del mediodía, con el fin de conseguir que la uva llegue lo más fresca posible a los depósitos. La vendimia es a mano y en cajas, y los visitantes que se acerquen a esas horas por el Palacio podrán ver en vivo el proceso artesanal. El Xamprada es un vino que se realiza siguiendo el método Champenoise, por lo que se debe vendimiar antes que los vinos convencionales para que la uva no coja demasiada graduación. Con ello se elabora el vino base, que más tarde se embotellará y realizará en botella la segunda fermentación, de ahí que el grado alcohólico vuelva a subir. Más tarde estará al menos 10 meses en la cava de la bodega antes de salir al mercado. Es el primer espumoso que se realizó en el Bierzo, una apuesta de José Luis Prada por la modernidad pero con el toque tradicional, de ahí que se haga con godello autóctono y con chardonnay, la uva principal de los champanes franceses, la que da cuerpo y estructura. Tras las uvas del Xamprada blanco se cortará, en una semana, la mencía que servirá de vino base del Xamprada rosado, un espumoso que hace algo más de un mes recibió un Zarcillo de Plata. En los primeros días de septiembre se dará paso ya a la elaboración de los vinos tranquilos con el godello y la mencía que servirán para los vinos jóvenes y de envejecimiento. Y el primero en poder disfrutarse en la copa será, como siempre, el Palacio de Canedo Maceración Carbónica 2015, pero para eso habrá que esperar a los primeros días de noviembre en la Fiesta del Vino Nuevo. La previsión de la bodega es que se puedan elaborar entre 30.000 y 35.000 botellas de Xamprada, entre blancos y rosados. En total, Prada a Tope recogerá entre ciento cincuenta mil y ciento sesenta mil kilos de uva, con los que se elaborarán vinos y espumosos, pero también Biermú (el vermú del Palacio de Canedo), Limonada y destilados.
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