Veinte años de artículos, desde 1987 a 2007, sobre el Bierzo que daban vida a la revista Cimada del instituto Álvaro de Mendaña, en el que fue profesor de Historia, vuelven de nuevo a cobrar vida ahora en conjunto, en el libro de José Antonio Iglesias. El profesor, natural de Corullón quería “que valoremos lo que tenemos” y vio como mejor manera publicar todos esos escritos en los que recopilaba Bierzo en un libro.
‘Con el Bierzo de fondo’ da nombre a esa publicación que busca sacar de la trastienda los tesoros bercianos, esos que se ven menos y son sus principales elementos. Por eso la fotografía de portada es el puente sobre el Boeza, para el que Iglesias había solicitado preservarlo como peatonal “es el Puente que abre el Bierzo, nuestra seña de identidad que no se valora”. Un puente medieval en el que asegura que nació Ponferrada y que era necesario convertir en peatonal, como él pidió. Mensaje reivindicativo en portada y nostálgico en la contraportada, que suma Corullón, el soto de castaños que le tocó a Iglesias en herencia y un abrazo conjunto con su amigo César Cabezas, que prologa el libro, al tejo de San Cristóbal, otro de los símbolos que defiende en su libro del Bierzo.
Pero ‘Con el Bierzo de fondo’ quiere ser el recorrido de un geógrafo, más que historiador, un andarín,que habla, en una primera parte del Bierzo “físico” en sí, de su orografía y relieve. Pasa después a la parte que más le atrae, el Bierzo rural “siempre me ha apasionado”, reconoce, en la que relata la arquitectura berciana, sus hórreos, palomares y también sus castaños, el árbol por excelencia de la comarca. Y reserva un artículo a su Corullón natal que titula con una referencia aprendida de Carnicer sobre Villadecanes traía a su pueblo “un lugar llamado Corullón”.
Habla Iglesias del Bierzo del vino, con la geografía de las vides y, en una tercera parte, de lo que “es el Bierzo para mí, una tierra de valles”. El patrimonio turístico berciano es otro capítulo en el que destaca los miradores, que considera que se han olvidado muchas veces “y el Bierzo es un paisaje al alcance de la vista”. No deja fuera el Camino de Santiago, que ha recorrido en varias ocasiones desde Foncebadón a Laguna de Castilla y los castillos, con el de Corullón encabezando el recorrido.
El profesor, que fue durante cuatro años presidente del Instituto de Estudios Bercianos también habla de la inauguración de la reconstrucción del Monasterio de Carracedelo, con la reina Sofía como invitada “me cautivó pirque pensé que era una persona altiva y me sorprendió por lo cercana y la información que tenía de todo”. Iglesias habla de ello y de Molinaseca como enclave del Camino. También de gastronomía y de la principales plazas de las localidades bercianas. Destaca el autor el relato que hace pormenorizado de las riberas fluviales y de los ríos e incluye curiosidades como la canción del magosto.
Un libro que el catedrático de Geografía e Historia quiere compartir como “inmersión en un tumulto de sentimientos, vehemencia y conocimiento”, dice su compañero de fatigas, César Cabezas en el prólogo.