El Bierzo se convierte en epicentro de la innovación forestal con la puesta en marcha del primer bosque laboratorio de Castilla y León, que comenzará sus actuaciones el próximo lunes 22 de septiembre en el municipio de Vega de Espinareda. Técnicos y socios del proyecto europeo PLANFORLAB recorrerán las parcelas de experimentación y decidirán sobre el terreno las primeras intervenciones.
Este espacio, de 25 hectáreas, servirá para analizar el estado de los pinares, detectar plagas de forma temprana y aplicar modelos de gestión innovadores. Al menos dos de las parcelas estarán cercadas y destinadas exclusivamente a la experimentación y demostración, y los resultados permitirán monitorizar la respuesta de los bosques al cambio climático y a enfermedades como la banda marrón o el nematodo del pino.
La iniciativa llega en un momento crítico para los pinares españoles, afectados por incendios, plagas y bajos precios de la madera, lo que ha puesto en riesgo la rentabilidad de las plantaciones y la industria maderera que depende de ellas.
Una alianza de referencia
El encuentro del lunes reunirá en Vega de Espinareda a la Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León (FAFCYLE), la Asociación Forestal de Galicia (AFG) –coordinadora del proyecto–, TRAGSA, la Fundación General de la Universidad de Valladolid, la Asociación Forestal de León, la Junta Vecinal de Vega de Espinareda, técnicos del Servicio Territorial de Medio Ambiente de León y la empresa Conserfor, encargada de los trabajos.
Financiado por la Unión Europea a través de los fondos FEADER y con apoyo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, PLANFORLAB busca crear una red de bosques laboratorio en Galicia, País Vasco y Castilla y León. También contempla la puesta en marcha de una plataforma digital para compartir resultados y favorecer la colaboración entre propietarios forestales, investigadores y gestores.
Con el inicio de las actividades en Vega de Espinareda, El Bierzo se posiciona como referencia nacional en innovación forestal, apostando por la prevención, la investigación y la sostenibilidad de los pinares que sostienen buena parte de la economía rural.