A pesar de la ausencia de la minería, Bembibre quiere seguir poniendo en valor sus raíces mediante el concurso de entibadores, un evento que cumple su edición número 43 y que premia la destreza de los participantes en la realización de cuadros de entibación.
La pareja del grupo Bocamina compuesta por José Manuel Pérez y Fernando Ambré resultó la ganadora de un certamen en el que participaron un total de trece dúos, esta vez sin representación berciana, bajo una intensa lluvia. Su puntuación total fue de 38,25 puntos, mientras que los segundos ganadores, Manuel Quirós y Raúl Castaño, también de Bocamina, obtuvieron 37 unidades. José Ramón Varona y Casto Rodríguez, del grupo de Palencia, lograron el tercer puesto con 35,75 puntos. Cabe recordar que los criterios valorados por el jurado son, entre otros, el ajuste, la labra, el aplomo y las medidas de las construcciones realizadas en un tiempo máximo de una hora y cuarto, la cual, si se excede, implicaría una penalización.
La alcaldesa del municipio, Silvia Cao, hija de minero, expresó la satisfacción que le causa haber podido recuperar este certamen, el cual, "mientras se mantenga este equipo de gobierno y mientras haya parejas que quieran venir, porque es verdad que la gente joven no va teniendo conocimientos de esta materia, lo seguiremos celebrando". Para la regidora, es más que necesario "recordar siempre las raíces mineras".
Por su parte, la concejala de Fiestas, Belén Martín, quiso resumir el valor que tiene una actividad de esta índole para la ciudadanía bembibrense: "Este evento tiene todo el valor del mundo. Nosotros somos un pueblo minero, vivimos de la mina, estamos donde estamos gracias a ella, por lo que las raíces no se pueden perder. Como ya no hay minas, es triste que esto tenga fecha de caducidad. Llegará un momento en que no haya entibadores, pero hasta entonces debemos aprovecharlo y darle todo el valor que podemos. Tenemos sangre negra y la minería muy calada en los huesos", aseguró.
También presenciaron la construcción de los cuadros de entibación los presidentes del Consejo Comarcal del Bierzo y de la Diputación de León. Olegario Ramón afirmó que "es la historia de lo que hemos sido hasta hace nada, y ojalá se mantenga durante mucho tiempo". Si bien considera que "el relevo generacional para este tipo de cosas está comprometido", fijó el objetivo de "intentar ser capaces de conseguirlo". Además, compartió la emoción de Silvia Cao, puesto que también él es hijo de minero: "A mí, personalmente, como hijo de minero, me resulta particularmente emocionante y emotivo estar en un evento así en calidad de presidente del Consejo Comarcal. Esto es el Bierzo y la historia de esta comarca durante tantos años y años".
Por su parte, Gerardo Álvarez Courel comentó que "el concurso de entibadores sirve para recordar el pasado minero de nuestra tierra", si bien aprovechó para espetar un reproche: "Aunque hubo algún alcalde de este Ayuntamiento que lo quitó, al que le parecía que no debíamos tener pasado minero, sí lo tenemos y debemos recordarlo". El nuevo presidente de la Diputación se mostró consciente de que "todavía hay gente que sabe hacer muy bien su trabajo aunque no lo haga en el interior de la mina. Lo hacen muy a conciencia, y esto al jurado le supone después un problema, porque lo hacen de una manera tan casi perfecta que es difícil elegir luego un ganador de forma adecuada". Por último, manifestó que "lo más importante de esto es recordar nuestro pasado minero, lo que no sólo es importante, sino que también es necesario, y Bembibre siempre ha mantenido, luchado, peleado y querido, salvo en esa pequeña época de oscuridad, que esté presente el pasado minero de todo el Bierzo Alto y de todas las cuencas".