El desenlace de la desaparición del peluquero ponferradino de 34 años, al que el 27 de julio se le perdía la pista, Alejandro Martín Ares, ha sido el peor, con la aparición, este lunes, según la Policía Nacional, de su cuerpo sin vida y sin aparentes signos de violencia, cerca de su coche en el perímetro que se le buscaba, en la zona del embalse de Bárcena. Al parecer, el cadáver se encontraba a unos 50 metros de la zona de baño del pantano, cerca de San Andrés de Montejos.
Tras una intensa búsqueda con drones en la zona y la preocupación social que desencadenó su desaparición, el cuerpo del joven cierra un capítulo agónico de la peor manera. Su familia ha estado destrozada desde que no se supiera nada de él desde el sábado en el que había quedado de asistir al cumpleaños de su abuela y nunca llegó.
El joven era propietario de la peluquería Fabrik, muy conocido en la ciudad y no tenía problemas económicos, según confirmaban fuentes familiares. Ahora la autopsia determinará la causa de su fallecimiento, según confirma la Delegación de Gobierno, aunque las prinicipales hipótesis rondan a que el joven habría decidido acabar con su vida.