Ya son cincuenta años de vida del Instituto Álvaro de Mendaña de Ponferrada. Con su director Santiago González a la cabeza, el centro educativo celebró este jueves una fiesta para soplar las velas que contó también con la presencia del director general de Centros e Infraestructuras de la Junta de Castilla y León, José Miguel Sáez.
En su discurso, González reivindicó que «este instituto ha hecho mucho por Ponferrada desde unos tiempos en los que no había infraestructuras educativas y culturales» hasta el presente, con 365 alumnos aprendiendo entre sus paredes. Así mismo, el director agradeció las «muchísimas» felicitaciones que ha recibido en estos días por parte de antiguos alumnos y profesores, pues «se sienten muy identificados con el instituto».
Aunque en Castilla y León existan institutos con más de cien años de antigüedad, el director general de Centros e Infraestructuras centró el foco en el Álvaro de Mendaña porque «representa un cambio sustancial en la educación». «Para los que venimos de la antigua EGB y pasamos al BUP, estos centros fueron referentes en su momento, evitaban desplazarte fuera de tu entorno y te permitían mantener una vida cultural y que la gente eche raíces. Estos centros de zona rural, aunque Ponferrada tiene ya cierta categoría, son básicos y los apoyamos siempre con inversiones. Pretendemos que, aunque tengan 50 años, sigan siendo centros modernos», añadió.
Una nueva rampa accesible
Precisamente, en este camino hacia la modernidad, el director anticipó que este verano está previsto que comiencen las obras con 90.000 euros ya autorizados para instalar una rampa que permitirá salvar el desnivel entre la avenida Huertas del Sacramento y los semisótanos (ocupados todavía por otras instituciones y centros educativos). Además, posibilitará que las personas con problemas de movilidad puedan acceder de una manera cómoda a estas instalaciones y, de igual modo, facilitará que los alumnos acceder al patio «en unas condiciones mucho mejores que las que tenemos ahora».
Esta rampa suplirá a la escalera que se vino abajo hace exactamente un año. Sobre este caso, la causa se ha archivado y el instituto se encuentra a la espera de recibir la autorización para retirar la estructura siniestrada.
