El agua embalsada se duplica en un mes gracias a las lluvias

Las lluvias y nevadas caídas en el último mes han mejorado sensiblemente las reservas de agua en los embalses de la provincia hasta situarlas en unos valores que, sin ser los deseados en el sector, invitan al optimismo. La ocupación llega al 30% en la provincia y las aportaciones siguen siendo elevadas, según los datos publicados por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD). La situación actual supone una inyección de esperanzas para los regantes leoneses, que después de una sequía histórica vieron como los embalses quedaban bajo mínimos.

Riaño es el que mejor se recupera con una entrada de 42 metros cúbicos por segundo y 24 hectómetros ganados en la última semana gracias, sobre todo a las nevadas. En el último mes han caído en el entorno del embalse de la Montaña Oriental Leonesa 104 litros por metro cuadrado, 331 desde que comenzó el año hidrológico. A pesar de ello, los datos de ocupación del principal embalse de la provincia están lejos de los registrados en las mismas fechas del año pasado, cuando contaba con 242,9 hectómetros cúbicos, y de la media de los últimos diez años, situada en 336,9 hectómetros cúbicos.

El embalse del Porma, que se combina con el de Riaño, también ha recuperado ocupación y cuenta ya con casi un tercio de su capacidad. En la última semana ha ganado 11 hectómetros cúbicos con 20,2 metros cúbicos por segundo de entrada.

En el de Barrios de Luna, del que depende el riego de las comunidades que más problemas sufrieron en la pasada campaña, las precipitaciones acumuladas desde que comenzó el año hidrológico son menores que en el caso de Riaño y del Porma con 279,2 litros por metro cuadrado con 12,6 hectómetros cúbicos ganados en la última semana.

Un caso excepcional es el del embalse de Villameca, donde la ocupación en estas fechas es mayor que la del año pasado y ya está al 25% de su capacidad y cuenta con buenos datos de entrada y de pluviometría.

En El Bierzo, el embalse de Bárcena, adscrito a la Cuenca Hidrográfica Miño-Sil, el que mejor se recupera de la provincia ha ganado más de 16 hectómetros cúbicos en la última semana y se encuentra al 40% de su ocupación, lo que invita a pensar que para la próxima campaña no presentará problemas.