Dos hermanos irán a juicio por clonar tarjetas de crédito y tener billetes falsos

Dos hermanos se sentarán en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de León los días 14 y 15 de este mes por un caso que se instruyó enSahagún y que se remonta al año 2009. El fiscal considera que ambos cometieron un delito de falsificación de tarjeta de crédito en concurso medial con un delito de estafa continuada y otro de tenencia de moneda falsa para su puesta en circulación y, por ellos, les reclama las penas de nueve años y cuatro meses de cárcel para uno y de siete años y diez meses para el otro.

Según explica en sus conclusiones provisionales, ambos "puestos de común acuerdo y guiados por el ánimo de obtener un beneficio patrimonial ilícito", clonaron tarjetas de crédito a partir del mes de agosto del año 2009 y las pusieron en circulación, realizando "compras y pagos" que cargaron en las cuentas de sus titulares. En su banda magnética habían incorporado "los datos ilícitamente obtenidos de otras tarjetas legítimas, sin conocimiento ni consentimiento de sus titulares", para lo que utilizaron –según se recoge en el escrito– equipos informáticos situados en el domicilio de sus padres, con los que convivía uno de los acusados, y en una vivienda anexa a la anterior, también propiedad de los progenitores de ambos y a la que acudía "con frecuencia" el segundo de los acusados.

Durante una entrada y registro llevada a cabo por la Guardia Civil el 19 de enero de 2010 en estos inmuebles los agentes encontraron un ordenador portátil que guardaba en su disco duro «apto para su uso» un programa instalado el 8 de agosto de 2009 para leer las bandas magnéticas de las tarjetas de crédito y otro instalado el 12 de agosto para el uso de lectores-grabadores de banda magnética. El fiscal destaca, además, que este equipo informático había sido manipulado para imposibilitar la recuperación de cualquier dato de trabajo que hubiera quedado grabado en el sistema operativo. No obstante, se explica que entre los equipos electrónicos destinados a la lectura y grabado de bandas magnéticas y las tarjetas bancarias clonadas por los acusados encontradas en el domicilio existe «plena coincidencia». En esa misma entrada y registro la Guardia Civil intervino también tres billetes falsos de 200 euros cada uno que los acusados guardaban en una caja dentro de una sembradora, así como parte del material informático necesario para las clonaciones de las tarjetas.

Apoyándose en este relato de los hechos la Fiscalía resume que los hermanos son coautores de un delito de falsificación de tarjeta de crédito en concurso medial con otro de estafa continuada y uno más de tenencia de moneda falsa para su puesta en circulación en los que concurre la circunstancia agravante de reincidencia en el caso de uno de ellos y la atenuante de dilaciones indebidas. Por eso reclama para uno de los acusados la pena de seis años y seis meses de cárcel por los dos primeros delitos y de dos años y diez meses de prisión por el tercero. Además de una multa proporcional de 2.400 euros con un día de privación de libertad por cada cien euros de sanción no satisfechos.

Mientras, estima que al otro procesado (no reincidente) debería imponérsele la pena de cinco años y seis meses de prisión por los dos primeros delitos y de dos años y cuatro meses por el tercero, con igual multa que a su hermano y el pago a la mitad de las costas derivadas del procedimiento.

El fiscal cita en su escrito a otro acusado que considera que "no denunció falsamente que con su tarjeta de crédito habían realizado sin su autorización reintegros en cajeros automáticos entre los días 2 y 8 de junio de 2009 por importe de 4.200 euros" y que, por lo tanto, "no es autor de delito alguno".