En un día de mucha presión, en el que perder suponía descolgarse de Europa y llegar al parón en dinámica negativa y dejando muchísimas dudas sobre el proyecto, los pilares del Abanca Ademar dieron un paso adelante y lideraron la reivindicación leonesa en el mejor escenario posible, enel campo del eterno rival.
30-37 se impusieron los leoneses al Atlético Valladolid en un partido en el que las dudas sólo estuvieron en un pésimo arranque que hizo temer lo peor, con el conjunto pucelano poniéndose en un visto y no visto 3-0 y obligando a pedir el primer tiempo muerto a Cadenas cuando sólo se habían disputado 3 minutos.
Le sirvió el toque de atención al Ademar, que tras ese parón cogió la delantera con un parcial de 0-5 y ya nunca la perdió, llegando a ganar hasta de cuatro (10-14) en una primera mitad que terminaron tres arriba (14-17), y abriendo aún más la brecha y jugando con la renta de en torno a los cinco o seis goles en una segunda parte en cuyos últimos 25 minutos el Ademar siempre mandó por cinco o más en el marcador.
Un triunfo que debería tener de premio el ‘billete’ para la Copa Asobal, que todo apunta a que estaba ya adjudicado pues tiene todas las papeletas para ser en León, pero para el que los de Cadenas también tendrían plaza si es en una sede neutral como Madrid ya que aún contando con la derrota de la semana que viene ante el FC Barcelona serán cuartos salvo que el Torrelavega logre una improbable victoria en Cuenca.
El Ademar se acerca a la Copa Asobal aunque esta fuera en una sede neutral como Madrid y no en León, pues terminará cuarto si Torrelavega no gana en CuencaUna victoria vital y con cuatro nombres propios muy claros, los de los cuatro mejores jugadores de la escuadra ademarista, que demostraron su condición y dieron la cara en uno de los días en los que más falta hacía.
Por encima de todos, sin lugar a dudas, el del meta Saeid. El iraní terminó lesionado, no pudiendo jugar en los últimos 20 minutos de encuentro, pero habían sido sus paradas las que habían hecho que en el momento de sentarse los leoneses ya estuvieran seis arriba.
Escandalosa fue su primera mitad, con paradas de todos los colores que tapaban las malas defensas o el hecho de dejar escapar multitud de rebotes concediendo segundas oportunidades, incluidas varias consecutivas en el parcial de 1-7 con el que el Ademar pasó del 3-0 al 4-7 tras el que nunca volvió a ganar ya de menos de dos. Incluso hizo un gol de portería a portería, no siendo el único de un conjunto leonés que castigó muchísimo el juego sin meta del Valladolid, llegando a hacer que renunciara a la variante de siete jugadores de campo que tanto le gusta utilizar.
Tras una pésima salida, del 3-0 se pasó al 4-7 y ya siempre mandó un Ademar cuya renta no bajó de 5 en los últimos 25’ Pero por su situación física, sin haber entrenado en toda la semana por una lesión en el adductor que de no estar el parón a la vuelta de la esquina le habría apartado del choque, hay que poner en valor la actuación de un David Fernández decisivo en el triunfo.
Parecía que iba a ser solo una solución de urgencia, pero jugó de titular y estuvo los mismos minutos que en un partido en el que estuviera al 100%. Y aunque le costó entrar en juego, pues a los 20 minutos llevaba solo un gol, en el tramo final de la primera parte y especialmente en la segunda fue clave, acabando con siete ‘dianas’, incluidas dos seguidas para sentenciar el triunfo cuando a 12 minutos para el final el Valladolid se había puesto a cuatro (24-28) tras dejar tres minutos y medio sin marcar a un Ademar que lograba ahí un parcial de 0-3 que le ponía de hecho con su máxima ventaja (24-31) que suponía la sentencia definitiva.
Saeid se fue lesionado con el Ademar 6 arriba.David pasó de descartado a clave, en el 20’ llevaba 1 gol y acabó con 7 ¿Los otros dos? Empiezan a no ser noticia. Uno fue el extremo Antonio Martínez, que celebró su entrada en la lista de la selección con una nueva demostración de efectividad en el lanzamiento, con once goles de doce intentos, siendo el fallo ya en el último minuto con el encuentro más que sentenciado. El otro el central Juan Castro, que volvió a dirigir a la perfección a un equipo que ha convertido en costumbre durante la primera vuelta rendir a un nivel altísimo en ataque, en gran parte por la forma de mover los hilos en él del leonés, que además hizo seis goles.
Con los cuatro a ese nivel y encima con un Valladolid muy desacertado y errático, la superioridad ademarista era clave. Y se plasmó en el marcador. Queda mucho por mejorar, pero el Ademar se ha garantizado irse al parón metido de lleno en la batalla por Europa.
Valladolid 30 - Ademar 37: 'Los pilares lideran la reivindicación'
Un Saeid estelar bajo palos, un Antonio letal en el tiro, un Castro perfecto en la dirección y un David decisivo pese a su lesión guían al conjunto leonés a un cómodo y claro triunfo en el derbi
04/12/2022
Actualizado a
04/12/2022
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