Y es que LaLiga sacó este año a subasta los diferentes paquetes de derechos televisivos, de los que dos quedaron sin adjudicar ante la falta de interés de los operadores, que no presentaron ninguna oferta para hacerse con ellos en exclusiva. Estos fueron el que se refiere a la emisión en establecimientos de hostelería y el que incluye los partidos de Segunda División para las próximas cinco temporadas.
Los clubes de Segunda votaron a la Ponferradina como su representante en el órgano de controlUna vez quedó desierto ese concurso en el mes de mayo, LaLiga optó por no convocar una nueva ronda para recibir ofertas y ha preferido comercializarlo de forma no exclusiva. Así, todo hace indicar que será LaLiga quién se haga cargo de la producción de cada uno de los 11 encuentros de la jornada para ofrecerlos a los diferentes operadores que pudieran estar interesados , lo que podría llevar al aficionado a tener que contratar diferentes servicios para poder ver todos los partidos de la competición. La otra opción sería que LaLiga los emitiese a través de su OTT, la plataforma audiovisual LaLigaSportsTV que cuenta ya con los derechos de diferentes competiciones deportivas como la Liga Asobal de balonmano, la LEB Oro de Baloncesto o la Liga Nacional de Fútbol Sala además de competiciones de muchos otros deportes. Sin embargo, parece complicado que la patronal pueda rentabilizar esta opción hasta el objetivo que se propone, que es replicar los 35 millones al año que Movistar pagaba por la difusión de la categoría de plata en exclusiva.
Lo cierto es que el dinero que se logra recaudar finalmente por la venta de los derechos televisivos de Segunda División no suponen un impacto importante en lo que recibirán los clubes, cuya principal fuente de ingresos procede de lo que se recauda por la venta de los de Primera División y que fueron otorgados a Movistar y DAZN por 4.950 millones de euros para las próximas 5 temporadas (el objetivo es lograr en torno a los 175 actuales en un contexto de recesión económica).
Una situación que del mismo modo no permite conocer si habrá o no partidos en abierto la próxima campaña, ya que el lote que lo incluía también quedó desierto fijándolo en solo un millón de euros en exclusividad.
La Deportiva gana responsabilidad
En este contexto de incertidumbre en lo que tiene que ver más con los aficionados que con la propia liga y sus clubes, que como decíamos ha asegurado la venta de los derechos de Primera División en cifras similares al último ‘tender’ y asegura por tanto su futuro más próximo, la Sociedad Deportiva Ponferradina ha pasado a formar parte del Órgano de control de la gestión de los derechos audiovisuales de la Liga, que conforman de manera permanente los dos clubes que más ingresos reciben por esos derechos, Real Madrid y Barcelona además del presidente de La Liga, Javier Tebas. Además cada temporada se eligen dos clubes de Primera y uno de Segunda a votación de los equipos con los que comparten categoría. Junto a la Deportiva han sido elegidos Atlético de Madrid y Osasuna.Las competencias de este órgano son gestionar la comercialización y explotación de los derechos audiovisuales en relación a las normas de LaLiga, proponer las condiciones sobre los criterios de reparto, controlar y revisar la gestión de los datos que otorgan los ingresos a cada club o establecer las normas en cuanto a la producción audiovisual entre otras.