Se marcha el mes de julio y con él, este mismo lunes, ponía punto y final a su etapa como director general de la Cultural y Deportiva Leonesa Felipe Llamazares. El que ha sido la cara visible del club durante prácticamente los últimos once años finalizaba su vinculación con la entidad para comenzar una nueva aventura profesional en el Racing de Santander, al que llega de la mano de la nueva propiedad que se ha hecho con la mayoría accionarial del club cántabro formada por Manolo Higuera y el argentino Sebastián Ceria.
Se va Llamazares por decisión propia, ante la propuesta de un club de superior categoría y con aspiraciones seguramente mayores que las de una Cultural en la que el desgaste personal cada vez ha ido yendo a más por los malos resultados deportivos del equipo, que le han puesto en el foco de la crítica de la masa social del club. La oferta del Racing de Santander, encima de la mesa de Llamazares desde el mes de junio, se ha terminado por convertir en el salvoconducto para un final que seguramente sea el más adecuado para el momento que vive la entidad.
Se cierra así una etapa con luces y sombras, con la principal y más importante noticia de su contribución para la llegada de Aspire a la propiedad de la Cultural y lo que ello ha supuesto a nivel económico para la entidad, saneada y envidiada por ello en la tercera categoría del fútbol nacional. Con él en la dirección general llegó el mejor momento deportivo del club en los últimos 40 años, el ascenso a Segunda División, si bien lo efímero del paso por la categoría de plata y la imposibilidad de recuperarla han terminado pesando.
Está previsto que Llamazares firme en las próximas horas su nuevo contrato con el Racing de Santander y que durante la semana se realice una comparecencia de prensa para despedirse, ya sí oficialmente, de la Cultural. Felipe se marcha, por iniciativa propia, en el momento en el que ha dejado cerrado el presupuesto para la próxima temporada (con ampliación económica tal y como demuestran los fichajes que está haciendo el club), cerrando las operaciones que había sobre la mesa en cuanto a salidas y dando el testigo al que todo indica que será su sucesor, Goyo Chamorro, que ya ejercía como representante del club este mismo fin de semana en Calahorra, labor que seguirá realizando como 'cara' de la entidad, si bien será Natichu Alvarado la que mantenga la estructura actual y dé continuidad a la gestión de la entidad en el futuro.