Por qué sigue ganando la Cultural Leonesa… o al menos no pierde. Pasado ya el tiempo desde el ultimo derbi, donde las voces del otro lado del Manzanal indignadas clamaban contra las ayudas arbitrales en las victorias culturalistas, se va demostrando que sencillamente gana porque es mejor, busca la victoria (o no perder) con mucho más ahínco, porque está en un estado de forma espectacular… en fin, porque es un digno contendiente, al que las formas poco decorosas del derrotado, no pueden menospreciar el enorme esfuerzo realizado por sus jugadores y técnicos. No gana por que el árbitro de turno, a quien la federación elige como el más adecuado, la ayuden o la dejen de ayudar.
La labor arbitral, ya de por si dura, es especialmente difícil en escenarios en que el ambiente y las emociones pueden condicionar dicha labor y más, como en el pasado derbi, cuando jugadores y cuerpo técnico de la Deportiva, lo hicieron especialmente difícil de dirigir. El respeto y las formas, jamás pueden perderse en alguien que dice ser un profesional y lo pregona en ruedas de prensa, llorosas y lamentables. Menudo ejemplo. Se habló mucho de la victoria, por la expulsión de un jugador deportivista… pues ahí se ve el valor, la formación y la integridad de un árbitro que expulso a un psicópata del futbol que sin poder llegar de ningún manera a jugar el balón, fue con todos los tacos por delante a la rodilla de Manu Justo y gracias al cielo que no fue precisa la asistencia médica y continuó jugando, porque estaríamos hablando de un lesión muy grave para el delantero de la Cultural. Quizá las explicaciones no había que pedírselas al colegido, sino al jugador deportivista por tamaña acción descerebrada.
Hay queda el ejemplo de la pasada jornada. De dos maneras de enfocar y entender el futbol… sus errores y sus condicionantes. Se equivocó el árbitro en el penalti contra la Cultural ante el Amorebieta. No hubo berrinches, no hubo ruido de sables, ni artículos malintencionados. Solo un entrenador caballero y señor, que se viste por los pies, lo asume y otra cosa. Se asumió que jugamos rematadamente mal y que tendríamos que haber sido más reconocibles en nuestro juego, pero eso fue todo.
Son muchos años aguantando arbitrajes vergonzosos, otras veces menos malos y sobre todo muchos años penando y sufriendo desilusiones siguiendo a la Cultu, pero quizá por ello, miramos con grandeza la derrota y felicitemos al ganador, cosa que algunos han de aprender a reconocer. Y claro que hay forofismo… Pero si es la sal del futbol, lo que mueve la pasión. Lo que no debe faltar nunca es respeto. Está claro que no vamos ascender, (con toda la cautela, que estamos en noviembre) por las ayudas arbitrales. Todo lo contrario como ya se ha visto. La afición culturalista sabe de sobra, lo duro que es el camino, sabiendo de la dificultad de todos los rivales y respetando a todos nuestros rivales como hasta ahora hemos hecho siempre. Quizá al otro lado del manzanal, deberían empezar a preocuparse por su futuro y mirar más su porvenir, porque visto lo del pasado derbi y el resto de la temporada, puede ser bastante más oscuro de lo que pensaban al inicio de la temporada. No olviden los kleenex y que en la vida, desgraciadamente, hay cosas peores.