
De repente está a punto el filial madridista de poner el 2-3 en el marcador. Tras el rechace de Gianfranco a un buen tiro desde la frontal de Cristo llega el primero al rechace Alberto, pero con todo a favor para marcar estrella el balón en el larguero.
Respira El Toralín. Pero no hay tiempo ni para resoplar, porque la Ponferradina monta rápidamente jugada. Yuri, que ha sido una pesadilla para la defensa, se cuela entre dos defensores y justo en la línea del área, Álex comete el error de meter el pie, derribándole y cometiendo un claro penalti que el mismo brasileño se encarga de convertir.
La Ponferradina terminó con diez tras ser expulsado Yuri en el descuento, durante la celebración del definitivo 3-2 Es el definitivo 3-2. El gol que da a la Deportiva un triunfo de prestigio frente a un rival directo. Que le consolida en el liderato y rompe de la mejor manera la racha de tres partidos sin conocer la victoria. Que demuestra que los bercianos también saben remontar. Que eso sí, les obligará a mostrar que pueden ganar sin su goleador, pues Yuri era expulsado en la celebración. Era lo único que le faltaba al punta, que forzó la falta del primer gol e hizo los otros dos.
Un final de locos para un partido que había vivido una primera parte apasionante, llena de intensidad, jugadas de calidad y cuatro golazos tremendos que hacían que ya al descanso el marcador igualara el partido de la Ponferradina con más tantos de toda la temporada.
2-2 iban los bercianos, que se habían adelantado muy pronto gracias a un magistral lanzamiento de falta. Y es que, en la jugada posterior a que Franchu hiciera el primer disparo a puerta del choque tras robarle el balón al lateral, Yuri se colaba entre tres defensas y era derribado en una posición ideal, en la medialuna del área, desde donde Óscar Sielva pegaba al balón por encima de la barrera y lo ponía en la escuadra de la meta defendida por Zidane.
Lo más difícil parecía hecho. Para un equipo que había encajado tres goles en las 10 primeras jornadas, el 1-0 se antojaba un botín inmenso. Pero esta vez el rival que había enfrente tenía más calidad que ningún otro al que se hubiera enfrentado este año la Ponferradina, y en apenas tres minutos se encargó de demostrarlo.
Sielva puso pronto el 1-0 al tirar por encima de la barrera una falta forzada por Yuri y poner el balón en la escuadraEn sólo 180 segundos el Castilla le dio la vuelta al partido con dos jugadas prácticamente calcadas, en las que el extremo hacía un jugadón por banda y ponía un centro que alguien remataba en el área pequeña.
¿El 1-1? Lo generaba Franchu, que se iba de dos defensores por la izquierda, llegaba a línea de fondo y desde ahí daba un pase atrás que llegaba para rematar libre de marca Fidalgo. ¿En el 1-2? Era De Frutos quien, en la banda derecha, le robaba el balón a Ríos Reina en la salida de balón, se marchaba de él con un regate y centraba hacia Cristo, que dentro del área resolvía a la perfección al girarse y pegarle a la media vuelta.
En un visto y no visto, el partido había cambiado por completo. Por primera vez en la temporada, los de Bolo se veían por detrás en el marcador. Pero en la adversidad la Ponferradina también demostró que sabe moverse bien.
Así, en el tramo final, mientras el partido se endurecía (tanto Franchu como Yuri se jugaron la roja al soltar el brazo en acciones que se saldaron con amarilla), el conjunto berciano se iba descaradamente a por un empate que a la segunda Yuri lograba.
El Castilla le dio la vuelta al choque en 3 minutos con 2 acciones iguales: jugada por banda y remate en el área Porque el delantero primero ‘perdonó’ y después brilló. Más allá del gol, la única ocasión de la Deportiva había sido con el 1-0 un gran tiro de Dani Pichín, desde la frontal escorado hacia la derecha, que cruzaba demasiado. Pero en cuatro minutos generaron dos.
¿En la primera? Jon centraba desde la derecha y Yuri llegaba para rematar, sin ningún defensa cerca, en el segundo palo, pero en una acción que nueve de cada diez veces acaba en gol con el brasileño como protagonista, remataba de forma horrible, pegándola mal y yéndose el balón muy desviado.
Pero en la segunda, mucho más difícil, hizo magia. Así, tras una gran jugada por banda de Jorge García, Yuri se iba a buscarla al primer palo y ahí se sacaba de la manga un precioso taconazo que ponía el 2-2 en el marcador.
Tras fallar una ocasión muy clara, Yuri se redimió con un taconazo a centro de Jorge. Era el 2-2 antes del descanso Había pasado de todo en la primera parte, pero tras el paso por vestuarios el panorama se calmó. De hecho, hasta el último cuarto de hora, apenas hubo llegadas. Todo el peligro del Madrid llegaba por la banda izquierda, pero las internadas de Álex y Franchu acababan en nada. Y únicamente una acción de Yuri, que se dormía cuando se había quedado solo ante el meta y era alcanzado por el defensa antes de que tirara, registraba la escuadra local.
Pero en los últimos 15 minutos, todo se aceleró. La Deportiva no se conformó con el empate y empezó a meter al Castilla en su área. Llegó una parada de reflejos de Zidane tras despejar Álex hacia su portería un centro de Pichín. Y un disparo de Isi que se iba por milímetros a la derecha de la portería defendida por el meta. Y un disparo, a la media vuelta dentro del área de David Grande, que se iba alto. Y por supuesto toda la citada traca final.
De irse de vacío a marcharse con todo el botín en un suspiro. Más líderes. Más optimismo de cara al futuro.