Ponferradina 0 - Levante 0: 'A la Deportiva se le escapa la sorpresa'

Cuando estás en la pelea por salvar la categoría los puntos saben muy diferente si se consiguen contra rivales directos o contra equipos que están en otra guerra, la del ascenso. Por eso, a priori el empate podía ser un buen resultado para la Sociedad Deportiva Ponferradina antes de que comenzase el partido de este sábado en El Toralín ante un Levante que llegaba en puestos de ascenso directo y lanzado.

Sin embargo, aficionados y equipo se marchaban este sábado del estadio con la sensación de haber dejado escapar dos puntos después de poner contra las cuerdas a un equipo granota con mala suerte en el cuarto de hora final, pero al que ya antes en la segunda mitad la Ponferradina le había exigido mucho.

Porque en esos últimos 15 minutos, el equipo berciano se vio jugando con un jugador y medio más, no porque hubiera ninguna expulsión en el encuentro – a pesar de que el partido se calentó en su tramo final – sino porque con los cambios ya hechos en busca de ese gol que decidiese el partido, el Levante vio como Rubén Vezo y Álex Muñoz se lesionaban. El primero no pudo continuar, el segundo lo hizo de la más precaria de las formas, prácticamente haciendo bulto y poco más. Apretó de todas las formas la Ponferradina en ese tramo final en el que redondeó una gran segunda parte a la que solo le faltó el gol.Naím, Moi Delgado y Derik Lacerda dispusieron de 3 ocasiones en ese tramo que, para ejemplificar el rendimiento del equipo en el global del segundo tiempo, no fue la más clara que tuvo la Ponferradina, ya que al poco de la reanudación tras el descanso un sensacional pase de Pascanu habilitaba a Edu Espiau, que con un gran control se plantaba ante Cárdenas sin suerte en la definición.

Las lesiones de Vezo y Muñoz dejaron con un jugador y medio más a la Deportiva el último cuarto de horaLe sentaron bien los cambios en ataque a la Ponferradina, especialmente con un Derik que, junto con Naranjo, probaron suerte desde lejos en dos disparos que no se fueron demasiado desviados. Fueron prácticamente todas las ocasiones de la segunda mitad para la Ponferradina, que apenas sufrió atrás con un tiro de Álex Muñoz que rebotaba en Pascanu y obligaba a emplearse a fondo a Amir y, ya en el descuento, un disparo de Musonda que se marchaba por poco.

Una gran segunda parte que borró la imagen y el sabor de boca que dejó una primera en la que el éxito fue llegar a ese descanso que cambiaría las cosas con el marcador igualado.
Porque lo cierto es que en la primera parte la Ponferradina se limitó a poco más que a correr detrás del balón. El Levante fue el que propuso y quitó el balón a los bercianos, que en su campo y bien armados buscando la contra, concentraron sus esfuerzos en impedir que la mucha calidad granota conectase. Y lo logró.

Si bien es cierto que la posesión fue prácticamente total para los visitantes, en el último tercio de campo le costó encontrar claridad y no logró alcanzar ocasiones claras de gol. De hecho fue en el balón parado en lo que más pudo inquietar el Levante la portería de Amir, con la presencia de un omnipresente Vezo y una acción aislada en la que Bouldini se adelantaba a la defensa y pillaba al iraní a media salida aunque sin lograr conectar su cabezazo a portería.

No aprovechó ninguno de los dos equipos las ocasiones que tuvo y eso desembocó en un empate a 0 que, contra pronóstico, dejó más contento al Levante que a la Ponferradina, que tiene que tomar lo visto como base para crecer con puntos en las montañas que le quedan por escalar. Toca el Pico de las Nieves.