Hay preocupación en el seno del Abanca Ademar por el estado físico del lateral portugués Miguel Oliveira, que en el único partido en el que estuvo disponible, frente al Puente Genil, dispuso de muchos minutos en el apartado defensivo, rindiendo a buen nivel, y ayudó algo en ataque, donde en pretemporada había tenido también buenos momentos aunque sobre el papel estaba destinado a ser usado más atrás.
Dolores abdominales han impedido que el jugador portugués forme parte de la convocatoria ademarista durante los dos últimos encuentros, frente a Benidorm y Nava, y al menos el domingo ante el Anaitasuna seguirá sin ser de la partida, existiendo temor a que su baja sea más prolongada.
Y es que Oliveira sufre una hernia estomacal, habiéndose desplazado este jueves a Oporto para que el conjunto portugués, del que es propiedad y que abona su salario completo, pues formó parte del traspaso de Antonio Martínez, estudie la dolencia, estando sobre la mesa la opción de que tuviera que acabar pasando por quirófano.
Una pieza menos para Dani Gordo en la primera línea, cuya baja se une al hecho de que Adelino todavía no tiene solucionados sus papeles para incorporarse y Katic continúa lesionado.